La pandemia por coronavirus provocó una nueva normalidad que se está implementando poco a poco a nivel mundial. Una nueva forma de cumplir los protocolos de distanciamiento social que provoca momentos únicos como el que vivió el técnico de la selección española Luis Enrique.
Después de la victoria contra Suiza por 1-0 por la UEFA Nations League, el ex entrenador del Barcelona se presentó en la conferencia de prensa virtual, dentro de una sala en la que solo recibe a los periodistas por medio de una pantalla.
Fue uno de ellos el que protagonizó un episodio inédito que provocó la sorpresa y las risas del seleccionador, que no podía creer lo que estaba sucediendo.
“Aquí damos un paso más, ya no vamos en coche sino vamos en coche y en marcha...”, anunciaba el presentador, antes de dar paso a la imagen.
“Esto es alucinante. Buenas noches seleccionador, estamos en un Cabify”, fueron las primeras palabras de Julio Suárez ante la atónita mirada de Luis Enrique, quien rápidamente le pidió que enfocara el interior del automóvil.
Al mostrar la parte de atrás del vehículo, apareció su novia, la periodista Elisa Laso y fue allí cuando el entrenador español no pudo contener las risas y continuó con el juego: “Tu novia... pues que haga la pregunta tu novia. Que pregunte lo que quiera”.
“Es Elisa Laso, es del Sevilla así que te podría preguntar por Jesus Navas”, le contestó el reportero, encaminando la amistosa conversación para el lado al que iba su consulta.
“La mejor valoración que puedo hacer de Navas es que viene a la selección prácticamente desde nuestra vuelta y es un jugador que su trayectoria esta ahí. Con unas condiciones físicas únicas y con una calidad técnica individual de altísimo nivel. Jugador TOP y si encima lo conoces como persona que es una maravilla como persona, da gusto tener jugadores de ese nivel”, explicó Luis Enrique ya en un tono más serio.
En lo que respecta a la victoria frente a Suiza, que le permite estar invicto y ser líder del Grupo 4 (League A) por delante de Alemania, explicó: “Me quedo con un detalle futbolístico importante, en los últimos minutos podía haber la tendencia de meterse atrás para defender el 1-0 y sufrir, pero el equipo supo adelantar líneas”.
Para Luis Enrique condicionó el encuentro el fuerte viento en Madrid que no ayudó a frenarlo las gradas bajas del estadio Alfredo di Stéfano. “Jugar con viento es lo peor, es desagradable. Prefiero hacerlo con lluvia y frío porque con viento es difícil predecir las jugadas”, concluyó.
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