Este domingo, los jugadores Phil Foden y Mason Greenwood han sido expulsados de la concentración de la selección de Inglaterra por incumplir en Islandia el protocolo de seguridad de la COVID-19, según confirmó el seleccionador inglés, Gareth Southgate.
Ambos jóvenes futbolistas, de 20 y 18 años respectivamente, fueron descubiertos con dos mujeres en el hotel donde se encontraban concentrados con toda la delegación del seleccionado inglés. Esta acción no solo rompió con el reglamento interno del conjunto, sino que además violaron el protocolo de seguridad por la pandemia del coronavirus.
Después de que el escándalo saliera a la luz, Phil Foden rompió el silencio a través de un comunicado en su perfil de Twitter para pedirle disculpas tanto a su entrenador, Gareth Southgate, como a sus compañeros, a los aficionados, al Manchester City y a su familia.
“Cuando fui convocado por Southgate para estos partidos, mi primera reacción fue de un inmenso orgullo. Ponerme esta camiseta en mi debut con la selección absoluta de Inglaterra fue un auténtico privilegio. Soy un joven jugador con mucho por aprender, pero soy consciente de la gran responsabilidad que tengo de representar a este nivel al Manchester City y a Inglaterra”, se lamentó.
“En esta ocasión tomé una mala decisión y mi comportamiento no se corresponde con las expectativas que hay sobre mí. Violé el protocolo sobre la COVID-19 que está para protegernos a mí y a mis compañeros. Por ello, ahora perderé la oportunidad de viajar a Dinamarca con mis compañeros, y eso me duele”, explicó el joven futbolista de 20 años.
“Aprenderé una valiosa lección tras este error y les deseo a Gareth y a mis compañeros buena suerte esta semana, concluyó el mediocampista, que fue desvinculado del equipo que hoy se enfrentará a Dinamarca por la segunda fecha del Grupo B de la Nations League, zona que comparten con Islandia y Bélgica.
Una de las implicadas ya había salido a hablar para dar detalles de lo ocurrido en esa habitación: “Fue una buena noche la que tuvimos, por supuesto. Los cuatro estábamos pasando tiempo juntos y conociéndonos. Fueron buenos chicos. Realmente muy agradables”, aseguró Nadia Sif Lindal Gunnarsdottir al Daily Mail.
Los dos futbolistas ingleses tuvieron que pagar una multa de 250.000 coronas islandesas (cerca de 1.500 euros/ 1.770 dólares), según hizo saber este lunes por la noche a la AFP la policía islandesa, encargada del caso. Ambos también fueron reprendidos por sus clubes.
Cabe destacar que por las reglas establecidas tanto por las autoridades británicas como por las islandesas, la delegación del equipo de Southgate no podía abandonar el hotel ni tener contacto con personas que no pertenecieran al grupo de trabajo, con excepción del partido.
El Manchester United y el City (clubes propietarios de sus pases) se expresaron en sintonía para repudiar lo hecho por los jugadores de su institución. “El Manchester United está en contacto con la FA (Federación Inglesa) y decepcionado con el comportamiento de Mason Greenwood”, advirtieron los Red Devils sobre el jugador que se unió a las categorías juveniles de esa entidad con seis años.
Foden, que está en la fila de los ciudadanos desde los ocho años, también recibió una reprimenda pública: “Es evidente que el comportamiento de Phil es totalmente inadecuado. Su actitud es contraria no solo a las directrices estrictas en relación con la COVID-19, está en las antípodas de lo que se espera de un jugador del City o del equipo de Inglaterra”, señaló el club sobre este mediocampista de 20 años que apenas tuvo su debut ante Islandia con la camiseta del equipo nacional, al igual que su compañero, Greenwood.
MÁS SOBRE ESTE TEMA: