En la semana 36 de la Premier League se vivió un entretenido encuentro protagonizado por el Liverpool y el Arsenal en el tradicional Emirates Stadium de Londres.
El reciente campeón se presentó en la casa de los Gunners con la misión de llevarse la victoria que le permita soñar con la cifra histórica de los 100 puntos. Tras el pasillo que le brindaron los protagonistas de Mikel Arteta a los hombres de Jürgen Klopp, el senegalés Sadio Mané abrió la cuenta para los de Anfield gracias a una extraordinaria acción colectiva. El 1 a 0 hacía suponer un triunfo de la visita.
Sin embargo, cuando el cronómetro marcaba la media hora un grosero error de Virgil van Dijk le permitió a Alexandre Lacazette emparejar el marcador. El blooper del central holandés fue capitalizado por el delantero francés y el suspenso se instaló en la capital inglesa.
Lo llamativo fue que al fallo del experimentado central se le sumó el de su arquero Alisson. El brasileño que es considerado uno de los mejores guardametas del mundo, improvisó un despeje defectuoso que favoreció el trabajo de Reiss Nelson, quien le puso cifras definitivas al triunfo del Arsenal por 2 a 1.
La victoria del dueño de casa tiene un sabor adicional porque los Gunners nunca le habían ganado al Liverpool desde que los Reds son dirigidos por el notable entrenador alemán.
De todos modos, la última alegría del elenco de Anfield en el Emirates se remonta al 4 de abril del 2015, cuando se impusieron con jerarquía al golear 4 a 1 a su rival.
Más allá de los datos estadísticos, los protagonistas que tenían como ambición superar el récord del Manchester City de Pep Guardiola se lamentaron con dureza la caída, porque a falta de 6 unidades para que concluya la competición, ya no podrán alcanzar los 100 puntos. Para el Liverpool la temporada terminó mucho tiempo antes que la suspensión que impuso la pandemia del coronavirus.
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