La intensa lluvia que cayó sobre Manchester no opacó el espectáculo que protagonizaron el City y el Arsenal en el Etihad Stadium. A pesar de la decisión de Guardiola de incluir a Sergio Agüero y Nicolás Otamendi en el banco de suplentes, el duelo correspondiente a la semana 28 de la Premier League entregó un notable talento a cargo de figuras de la talla de Kevin de Bruyne, Gabriel Jesús, Sterling, Aubameyang y Xhaka, aunque la prematura lesión del atacante suizo obligó a Mikel Arteta a reemplazar al ex Borussia Monchengladbach por el andaluz Dani Ceballos.
Tuvieron que pasar 100 días para que el certamen británico vuelva a la actividad. En un torneo que tiene como máximo candidato al Liverpool por la histórica cosecha de 82 puntos en 28 presentaciones, el duelo entre los Ciudadanos y los Gunners sirvió como medida para los próximos desafíos internacionales y luchar por un lugar en las competiciones europeas de la próxima temporada.
El choque fue accidentado. En menos de 20 minutos la visita debió emplear dos variantes a causas de las dolencias musculares de sus protagonistas. La salida de Pablo Marí por David Luiz marcó la preocupación del entrenador vasco oriundo de San Sebastián.
Un tiro libre ejecutado por la estrella belga y un remate rasante de David Silva fueron los elementos más punzantes para que el dueño de casa se ponga en ventaja, pero las impresionantes respuestas de Leno mantuvieron el marcador en blanco. Si bien el Manchester City sufría varias imprecisiones, la jerarquía de sus intérpretes era suficiente para lastimar la valla defendida por el arquero alemán.
Así, unos instantes antes de que finalice la primera etapa, el defensor brasileño cometió un grosero error infantil que fue capitalizado por el velocista inglés. A diferencia de la delicadeza que había intentado unos minutos antes, Sterling optó por la potencia para festejar el 1 a 0 y llevar la victoria parcial a los vestidores.
Cuando se reanudó el espectáculo David Luiz volvió a aparecer en escena para que su rival extienda la diferencia. Un penal infantil le dio la posibilidad de De Bruyne de celebrar el 2 a 0 para que el combinado de Pep Guardiola liquide el pleito con 40 minutos de antelación. Además, el ex PSG y Chelsea dejó a su equipo con inferioridad numérica por la exagerada sanción que le aplicó el árbitro Taylor: roja y a las duchas.
Un terrible choque entre Ederson Moraes y Eric García llenó de preocupación al terreno de juego. El central español debió ser retirado con tubos de oxígeno debido al duro golpe que sufrió de su compañero. Tras estar inmóvil durante más de 5 minutos, el partido se reanudó con los ingresos de Foden y Agüero.
Así, en una de las últimas acciones, el Kun estrelló un remate en el poste que fue capitalizado por el goleador inglés para cerrar el 3 a 0. Una vez más el Manchester City ganó, gustó y goleó.
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