Tras el éxito del regreso de la Bundesliga, la primera liga de élite que retomó su competencia en medio de la pandemia del coronavirus, otros de los mejores torneos del mundo empiezan a sumarse a esa desescalada. Como por ejemplo La Liga española, que ha conseguido el visto bueno del Gobierno para retomar su temporada 2019/20 a partir del 8 de junio.
El presidente Pedro Sánchez ha anunciado este sábado en su comparecencia semanal sobre la crisis del COVID-19 que el fútbol en España podrá retomarse dentro de tres semanas, en consonancia con la preferencia de Javier Tebas, presidente de LaLiga.
Sánchez aseguró que para esa fecha está previsto que toda España esté en fase tres, que marcará la nueva normalidad, y que por tanto se autorizarán las grandes competiciones deportivas. Esto indica que el campeonato volverá a jugarse probablemente a partir del viernes 12.
En las últimas horas hubo una reunión entre LaLiga y el sindicato mayoritario de futbolistas, AFE, donde afinaron sus intenciones de retomar las 11 fechas restantes del campeonato de primera división, aunque debían esperar el visto bueno del Ministerio de Sanidad. También la idea es que el próximo lunes todos los equipos comiencen con los entrenamientos con el grupo completo, ya sin el límite de 10 jugadores por ejercicio, para llegar de la mejor forma posible a nivel físico.
Ahora deberán trabajar La Liga y la Federación Española para armar el calendario y delimitar las pautas bajo las que se desarrollará el torneo, como por ejemplo si habrá confinamientos permanentes de los futbolistas como medida sanitaria para evitar los contagios.
Como también sucedió en Alemania, la vuelta del fútbol profesional supone un alivio económico para los clubes, que estimaban más de USD 1.000 millones en pérdidas si el balón no volvía a rodar para concluir esta temporada. Si se disputan las 11 jornadas restantes, pese a ser sin público, la pérdida de ingresos se reduce hasta aproximadamente 300 millones.
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