Ya es sabido que los ancianos son una de las poblaciones de alto riesgo en la pandemia mundial de coronavirus y que deben tener mucho cuidado para no contagiarse de esta enfermedad. Por ello cuando el futbolista Cesc Fàbregas utilizó las redes sociales para comunicar que su bisabuela de 95 años logró vencer al COVID-19 le llovieron todo tipo de comentarios.
El ex jugador del Arsenal FC, FC Barcelona y Chelsea FC, quien es uno de los mejores amigos de Lionel Messi, ha utilizado su cuenta de Instagram para compartir con sus más de 11,3 millones de seguidores su felicidad con una emotiva carta.
“Ha superado el coronavirus con 95 años. ¡Ayer el test salió negativo!. Mi bisabuela es una superheroína, pero nada de esto sería posible sin la ayuda de todos los enfermeros y doctores que se están dejando la vida en cada instante para que todos/as podamos estar mejor y vivir un poco mejor en estos tiempos tan difíciles”, escribió el jugador.
Además, Fábregas mandó un mensaje de aliento a sus seguidores y agradeció a la residencia de ancianos con la que él colabora económicamente. “Gracias a todas las personas del Remei de Arenys de Munt por el sacrificio tan grande que hacen por estas personas mayores. ¡Todo nuestro respeto! Nada es imposible. ¡Gracias!”, sentenció.
Cesc, campeón del mundo con España en 2010, actualmente se encuentra haciendo la cuarentena en Francia junto a su mujer, Daniella Semaan, los dos hijos de ella y los tres que tienen en común. Más allá de su lugar de residencia actual y de tener que cumplir con el aislamiento, ha estado muy pendiente de su familia y sobre todo de su bisabuela, quien contrajo el COVID-19 junto al 70% de los ancianos que vivían en la misma residencia.
Al enterarse, Fábregas no dudo en colaborar para combatir la crisis sanitaria y se hizo cargo de los gastos de hotel de 15 ancianos que habían dado negativo en este recinto de Arenys de Munt, su ciudad natal, una localidad que queda a 45 kilómetros de Barcelona.
También el actual jugador del AS Mónaco decidió rebajarse unilateralmente el sueldo en un 30% para que su club pueda pagarle al resto de los empleados, según informó RMC Sport. La idea de Cesc Fàbregas, quien ya no volverá a la actividad hasta la próxima temporada porque Francia dio por finalizado su torneo, es salvar los ingresos de los miembros del personal médico, los preparadores físicos y el resto de empleados que están afectados por la crisis financiera que provocó el coronavirus.
MÁS SOBRE ESTE TEMA: