Cuatro meses pasaron de la última vez que Neymar disputó un partido oficial con la camiseta del Paris Saint Germain. Fue el 11 de mayo ante Angers, en el marco de la fecha 36 de la pasada Ligue 1.
Desde ese entonces, su nombre siempre fue noticia, pero en la mayoría de los casos por cuestiones extradeportivas: una denuncia por supuesta violación, lesiones y su posible transferencia a clubes como Barcelona, Real Madrid o Juventus.
El mercado de pases en las principales ligas de Europa finalizó y el brasileño finalmente no se movió del PSG. Con la novela terminada, y ya sin secuelas de su última lesión, Thomas Tuchel tomó la decisión de convocarlo para el partido de este sábado ante Racing Club de Estrasburgo en el Parque de los Príncipes.
Esta decisión no fue bien vista por una facción de los ultras del equipo de la capital francesa. Los denominados Collectif Ultras Paris, mediante un comunicado en las redes sociales, apuntaron contra la actitud de Neymar y le enviaron un claro mensaje: "El camino de la redención será largo".
Los simpatizantes que habitualmente se ubican en la tribuna Auteuil reconocen el talento del futbolista, pero dieron a entender que el recibimiento que tendrá en su vuelta a los campos de juego no será la mejor.
"Lo que le reprochamos es que le haya faltado el respeto repetidamente a nuestro club, incluso haberlo humillado algunas veces", remarcó el comunicado de los ultras.
Dentro del texto que difundieron en su cuenta de Twitter, el Collectif Ultras Paris le envió un claro mensaje al resto de los aficionados del PSG: "Es por eso que invitamos a todos los aficionados que se sintieron molestos en algún momento a mostrarle que ya no tiene derecho a cometer errores y que el camino de la redención será largo… muy largo. Esto ya queda en el pasado, no vamos a penalizar a todo un equipo por un solo jugador. Desde el domingo, optaremos por la indiferencia en lo que respecta a este jugador".
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