Este lunes Kevin De Bruyne utilizó el sitio The Players Tribune para escribir "Déjenme hablar", una columna en la que hace un repaso por su carrera, desde su adolescencia en Genk hasta su presente brillante en el Manchester City.
El belga, hoy convertido en uno de los mejores futbolistas del planeta, explicó algunas de las claves que lo llevaron a ser parte de este selecto grupo de jugadores y entre ellas se destaca su trabajo con Josep Guardiola.
El mediocampista conoció a "Pep" cuando el español arribó al club británico en la temporada 2016/17, en ese entonces De Bruyne ya había tenido un gran paso por el Wolfburgo y un intrascendente período en el Chelsea de José Mourinho.
"En la primera reunión que tuve con Pep, él se sentó y me dijo 'Kevin, escucha. Tú puedes ser fácilmente uno de los cinco mejores jugadores del mundo. Un Top Five. Fácilmente'". Aquellas palabras sonaron extrañas en los oídos de alguien que había sido descartado por Mourinho: "Si Mata es cedido a préstamo, serás mi quinta opción", le había dicho en la última charla que tuvieron antes de que pidiese ser transferido para ganar minutos de juego.
Desde aquel diálogo con Guardiola, el City ganó cuatro títulos y aún puede sumar tres esta temporada: la Premier League, la FA Cup y la tan ansiada Champions League, trofeo ausente en las vitrinas de la institución celeste. Por su parte, De Bruyne conformó el 11 ideal del Mundial de Rusia y es uno de los candidatos a ganar el premio The Best y el Balón de Oro este año: "Cuando Pep lo dijo con tanta convicción, cambió toda mi mentalidad. Fue una especie de genio, creo".
En su columna, el futbolista de 27 años contó algunos de los secretos de Guardiola: "Para ser justos, él (Guardiola) vive el fútbol de manera mucho más intensa que yo. Está demasiado estresado todo el día. A pesar del estrés mental al que nos enfrentamos como jugadores, creo que él tiene al menos el doble. Porque no sólo está interesado en ganar, él busca la perfección".
A diferencia de lo que le ocurrió en otros clubes, De Bruyne explica que aquí él debe demostrar en el campo de juego que el entrenador tiene razón al confiar en él, no demostrar que estaba equivocado (como sucedía con Mourinho que no lo tenía en cuenta). "La mayoría del tiempo el fútbol es negatividad y miedo. Pero con Pep, se trata de un extremo positivismo".
El volante contó algunos de los secretos del "Método Guardiola" al que ha apostado el Manchester City: "Establece metas que son tan altas que son casi imposibles de alcanzar. Él es un maestro táctico, sí. No hay duda de esto. Pero lo que la gente en el exterior no ve es la presión que ejerce sobre sí mismo para tratar de alcanzar la perfección".
El objetivo del club británico es coronar esta temporada con la Champions League, certamen que el técnico español consiguió en dos oportunidades al frente del Barcelona pero que no pudo levantar durante su paso por el Bayern Múnich. Para esto De Bruyne será clave ya que se ha convertido en el cerebro del equipo. Todo gracias a la confianza que le dio el entrenador con aquella frase y al trabajo diario por alcanzar la perfección.
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