La fugaz “aparición” de Messi en la entrega del Balón de Oro que se ganó una de las ovaciones más estruendosas de la gala

* El instante de la irrupción de la Pulga

Lionel Messi ganó siete Balones de Oro en su historia, incluyendo el galardón del año pasado. Sin embargo, no estuvo entre los nominados en la gala 2022. Si bien es real que tuvo una temporada anterior irregular, signada por las lesiones, el COVID-19 y la tortuosa mudanza del Barcelona al PSG, resultó polémico que no apareciera en la lista de aspirantes.

No obstante, y aunque no pasó por la alfombra roja donde es habitué, sí estuvo presente en la ceremonia realizada en el Teatro du Chatelet. Es que en el inicio del evento la apertura estuvo a cargo del cantante Andrea Bocelli, quien matizó con su privilegiada voz el video por el que pasaron todos los ganadores del cetro. A medida que iban apareciendo las imágenes, las estrellas fueron recibiendo los aplausos por parte de los habitantes de las butacas.

¿Y quién cerró la recorrida? Sí, la foto de Messi, con sus siete Balones y los años en los que los alzó (2009, 2010, 2011, 2012, 2015, 2019 y 2021). Y allí se escuchó una de las máximas ovaciones de la jornada, comparable con la que recibieron los locales Zinedine Zidane y Karim Benzema, el gran vencedor de la gala.

¿Por qué no entró el argentino de 35 años, entre los 30 nominados? Las modificaciones en el criterio de selección fue unos de los argumentos, ya que la votación estuvo más centrada en el rendimiento individual de los jugadores y quedó relegado el palmarés conseguido por los protagonistas en sus carreras. Otro de los cambios fue que ahora se mide el calendario de las temporadas, no anualizado (enero a diciembre), lo que por ejemplo dejó fuera de la consideración el título de la Copa América que Leo logró con la selección argentina tras vencer a Brasil en el mítico Maracaná.

Frente a este escenario, se puede decir que el astro rosarino tuvo números menos impactantes desde lo estadístico en el periodo evaluado (2021-2022): jugó 34 partidos con su nuevo equipo. Fueron 26 en el torneo local, que incluyeron 10 tantos y 14 pases gol, lo que habla de su rol. Ganó la Ligue 1. Al mismo tiempo, lideró a la selección argentina en la clasificación al Mundial de Qatar y celebró la Finalissima, con goleada ante Italia en Wembley. Para L’Equipe y France Football resultó insuficiente.

A pesar de residir en París, donde brilla en el PSG, Messi no participó de la gala en la que uno de los anfitriones fue el ex futbolista Didier Drogba. Si los números lo dejaron fuera de la elección para el Balón de Oro de la temporada pasada, en la actual está en carrera con fuerza.

Ya obtuvo la Supercopa de Francia y muestra un altísimo rendimiento en tridente con Neymar y Mbappé (ocho goles y ocho asistencias en el presente curso). Sí, justo en el umbral del Mundial de Qatar, su quinta Copa del Mundo y, tal vez, el máximo objetivo que le queda en su carrera. Quizás, en la próxima gala, tenga un rol mucho más preponderante que una foto, más allá de que le alcanzó para ganarse una estruendosa ovación.

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