* Lo mejor de la final de la Reserva
Lanús venció por 1-0 a Estudiantes de La Plata y se consagró campeón de la Copa de la Liga de Reserva. El gol del Granate lo anotó el delantero Gonzalo Torres a los 26 minutos de la primera etapa en el encuentro decisivo jugado en el estadio Centenario de Quilmes, y significó la cuarta estrella para los dirigidos por Rodrigo Acosta, hermano de Lautaro: dominaron la categoría en la temporada 1997/98, 2010/11, 2019/20 y el reciente torneo disputado en la primera mitad de 2022.
El camino del campeón hacia la final arrancó con un segundo puesto en la Zona 2 con un total de 25 puntos, que le dio derecho a medirse con Banfield en cuartos de final. En el Clásico del Sur borró al Taladro desde el punto del penal después de igualar 1-1 en el tiempo regular, doblegó a Central Córdoba de Santiago del Estero en las semifinales por 2-1 para reclamar su lugar en el enfrentamiento culmine.
Por otro lado, Estudiantes fue quien lideró el grupo del Granate con 27 unidades y también eliminó a su rival de toda la vida, Gimnasia de La Plata, desde los doce pasos luego de empatar sin goles en los primeros 90 minutos. Una semana más tarde derrotó con autoridad a River Plate por 3-1 en el estadio UNO y accedió al partido por el título.
Con un 4-3-3 como esquema predilecto y Juan Pablo Krilanovich como capitán y estandarte del equipo, el flamante campeón de Reserva le hace señales a Jorge Almirón para que comience a darle rodaje a las grandes promesas que demostraron un buen rendimiento a lo largo del año.
Más aún si se tiene en cuenta la 12° posición del plantel de Primera en la reciente Copa de la Liga Profesional y la necesidad de un plantel amplio para los choques correspondiente en la Copa Argentina frente a Godoy Cruz y octavos de final de la Sudamericana contra Independiente del Valle en la segunda mitad de 2022.
En el contexto de una final cerrada, el Granate golpeó en la primera mitad y luego buscó lastimar con espacios, ante un adversario al que le costó lastimar, más allá de que intentó sobre todo con balones aéreos. No fue la definición más brillante por todo lo que había en juego, pero Lanús festejó. Y sobre todo celebra los buenos valores de los que seguirá disponiendo para formar futuro equipos y apuntalar su economía con la venta de sus proyectos una vez que se asienten en la élite.
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