River Plate, con gol de Enzo Fernández (45+1m, de penal), le ganaba a Atlético Tucumán por 1 a 0 en el encuentro válido por la duodécima fecha de la Copa de la Liga Profesional. Sin embargo, el Decano sorprendió al Millonario en el Monumental con un tanto de Ramiro Ruiz Rodríguez a los 12 minutos del complemento. Este tanto del empate llegó tras una floja reacción del arquero local, quien no pudo despejar largo un remate cruzado de Ciro Rius y en el rebote le dejó servido el tanto del empate al elenco tucumano.
River Plate y Atletico Tucumán disputaron un primer tiempo muy pobre, con escasas jugadas de peligro. De hecho, la apertura del marcador fue con el primer remate al arco del Millonario. Fue de penal, tras la conversión de Enzo Fernández y luego de una exquisita habilitación entre líneas de Julián Álvarez para Matías Suárez, quien cayó luego de que Manuel Capasso lo derribara dentro del área.
Con la ventaja mínima, el equipo de Marcelo Gallardo se fue al descanso. Pero poco le duró, ya que en el complemento no se pudo imponer desde el marcador y tras una salida descoordinada en defensa, Atlético Tucumán hilvanó una gran jugada colectiva. La misma terminó con Ciro Rius por derecha y un remate picante cruzado, que se encontró con una floja reacción de Franco Armani, quien dio rebote corto y alto, a la altura de la cabeza de Ruiz Rodríguez.
No es la primera vez que Armani demuestra estar lejos de su mejor nivel. En la fecha pasada frente a Talleres en Córdoba, el combinado liderado por el portugués Pedro Caixinha capitalizó el recambio que hizo Marcelo Gallardo en el equipo y lo venció con un golazo de Diego Valoyes. En esa acción también llamó la atención la postura pasiva del arquero de River.
La escena iniciada por Federico Girotti encontró a Rodrigo Villagra dentro del área y el volante le dio continuidad al peligro con una asistencia hacia el colombiano. En ese instante, el goleador cafetero improvisó una maniobra extraña que derivó en el 1 a 0. La resolución del delantero descolocó al arquero del Millonario, quien evitó cualquier tipo de reacción y se desplomó cuando la pelota se encaminaba hacia el fondo de la red.
Una fecha antes, frente a Banfield como visitante, Armani también cometió un error grave que le posibilitó el gol a Amos Perales a los 24 minutos. El blooper del arquero fue cuando perdió la pelota en el aire al saltar a luchar mientras Gregorio Tanco le disputaba la posición. Pese al reclamo, el gol fue totalmente válido porque no existió carga ni contacto del marcador central local que amerite ninguna sanción.
Vale recordar que en Superclásico con Boca Armani también tuvo responsabilidad en la conquista de Sebastián Villa que concretó la victoria del Xeneize en el Monumental. Si bien el error más grosero lo cometió el defensor Leandro González Pirez, con una falta de concepto notorio, el ex Atlético Nacional demoró en su salida y facilitó la tarea del atacante boquense.
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