Lionel Messi volvió a brillar como tiene acostumbrado a cualquier espectador. Luego de dos partidos de sequía en la Ligue 1, la Pulga retomó su nivel en la última fecha de la fase de grupos en la Champions League frente al Brujas en el Parc des Princes. La sociedad con Kylian Mbappé poco a poco va tomando fuerza y Ángel Di María por ahora parece ser el que mejor se acopla a las dos estrellas en el frente ofensivo del París Saint Germain.
El delantero francés arrancó a todo motor con dos tantos en seis minutos en lo que el rosarino no tuvo influencia en la construcción. Ya con la ventaja en el marcador, Messi tuvo dos oportunidades claras de frente al arco de Simon Mignolet las cuales resolvió de manera defectuosa: la primera se encerró contra la línea de fondo donde lo cerraron entre el defensor central y el arquero y la segunda un remate cruzado que quedó en las manos del arquero. Sin embargo, una oportunidad con algo más de espacio fue suficiente para anotarse en el marcador.
La clásica maniobra de la Pulga encarando de izquierda a derecha, un enganche para sacarse a la marca del Brujas y la definición a pie abierto al palo lejano de Mignolet hizo parar a todo el estadio. Una vez más, Mbappé se anotó como asistidor de Messi con un exquisito cambio de banda para dejarlo con la cancha de frente y el arco entre ceja y ceja. Club número 38 distinto que el argentino le anotó en la competencia más importante a nivel clubes en Europa, igualando la marca que defendía Cristiano Ronaldo.
Pocos minutos más tarde, el 30 visualizó uno de los tantos piques imparables de Kylian entre los defensores del cuadro belga y con un quirúrgico pase lo dejó mano a mano que lamentablemente el francés definió por arriba del travesaño. Una primera mitad plagada de oportunidades y que justificaron la goleada con la que el PSG llegó al entretiempo.
En la segunda parte, el local bajó un ritmo y las participaciones de Lionel fueron algunos pases cortos para hacer circular la pelota. Un pase a Di María que no pudo definir bien fue la única acción antes del descuento del Brujas que obligó a Mauricio Pochettino a realizar algunas modificaciones para despertar a sus dirigidos que cedieron espacios y también la posesión del balón.
A los 74′, cubrió la pelota de gran manera dentro del área, Ruud Vormer le tocó la pierna derecha y el árbitro Jesús Gil Manzano cobró penal sin dudarlo. El mismo argentino se encargó de patear la pena máxima y un fuerte remate cruzado al palo izquierdo de Mignolet fue suficiente para anotarse una vez más en la tabla de goleadores. Una de las mejores actuaciones de Messi con la camiseta del PSG por la soltura y la cantidad de espacio que le ofreció el club belga a lo largo del transcurso del encuentro.
Los resultados que se dieron en el Grupo A simplemente acercaron diferencias entre el cuadro francés y el Manchester City, que por lo sucedido en la jornada pasada dejó a los ingleses como ganadores de la zona. Con tres victorias, dos empates y una derrota los dirigidos por Pochettino cerraron con once unidades y se enfrentarán en octavos de final de la Champions League frente a algún club que haya finalizado primero.
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