Boca Juniors perdió con Independiente en Avellaneda y no pudo arrimarse a los puestos clasificatorios a la próxima Copa Libertadores. Carlos Benavídez fue el autor del único tanto del Rojo, que convirtió en una de las dos chances que tuvo en el primer tiempo. En dicha etapa, el Xeneize dejó una muy buena imagen. Contó con varias situaciones claras de peligro, pero no estuvo fino a la hora de concretarlas. Vale recordar que Sebastián Battaglia para este encuentro había modificado a siete futbolistas respecto del último juego ante Sarmiento de Junín en la Bombonera. Pese a ello, el equipo no desentonó aún en destventaja.
Pero todo cambió en el complemento. Boca Juniors se mostró más nervioso e Independiente lo aprovechó. El conjunto local se cerró bien y con contragolpes fue sacando del partido al Xeneize. Battaglia apeló a los cambios rápidamente, incluso los cinco que realizó en el estadio Libertadores de América fueron con futbolistas que había sacado para darles descanso (Cardona, Vázquez, Fabra, Villa y Ramírez).
Los dos primeros fueron a los 16 minutos cuando dispuso las salidas de Agustín Almendra y Cristian Pavón. Justamente Kichán fue uno de los protagonistas al reaccionar con furia en el banco de los suplentes. El delantero, luego de saludar al entrenador, le pegó en varias oportunidades al techo del sector de relevos y luego revoleó un par de botellas al campo de juego. Una de ellas incluso debió ser recogida por su compañero Fabra, mientras que la última terminó salpicando a Carlos Zambrano.
El peruano, quien estaba a su lado, le pidió que se calmara y ante la respuesta del cordobés, se paró y hubo un discusión que no pasó a mayores por la rápida intervención de sus compañeros. En las imágenes que fueron captadas por las cámaras de ESPN se pudo ver también que Zambrano y Pavón continuaron discutiendo a la distancia, aunque lo cerraron con un apretón de manos.
Carlos Izquierdoz fue el otro gran protagonista de Boca Juniors que expuso el nerviosimos generalizado en Avellaneda. El capitán no se pudo controlar cuando Alan Velazco le pateó una pelota lejos y le aplicó un codazo a la altura del estómago. El árbitro Pablo Echavarría lo amonestó primero, pero luego de que le recriminaran todos los futbolistas de Independiente, volvió atrás y le mostró la roja directa a zaguero central. Seguramente, el juez, que no tuvo una buena labor y por momentos el partido se le fue de las manos, confundió la tarjeta y lo corrigió a tiempo.
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