El atrevimiento del Pulpo antes de que arrancara el partido
El duelo por la revancha de los octavos de final de la Copa Libertadores entre Atlético Mineiro y Boca en el estadio Mineirao empezó a elevar la temperatura antes del pitazo inicial. Es que Diego González se acercó hasta la posición del cuarteto arbitral que presenciaba el sorteo de capitanes entre Carlos Izquierdoz e Ignacio Fernández y se tomó el atrevimiento de extirparle la pelota al juez Esteban Ostojich.
Como no había balones disponibles para completar la entrada en calor tras la salida de los equipos al campo de juego, el Pulpo se impacientó y decidió “robarle” el esférico al árbitro uruguayo, que detuvo la tirada de moneda al aire para reclamárselo.
“Carlos, te saludo de nuevo. Nacho (Fernández)... La visita elige, ¿te parece? Blanco o negro”, fue el diálogo previo de Ostojich con los portadores del brazalete. Ahí mismo González irrumpió en escena y se llevó la pelota, algo que generó la inmediata reacción del referí.
“Ya vamos a empezar, señor. González, el balón por favor. ¿Me trae el balón por favor? Gracias, gracias”, le rogó Ostojich al Pulpo, quien no conforme le pidió explicaciones de por qué el rival sí disponía de pelotas para moverse en la cancha y al equipo visitante no le habían acercado alguna todavía. Luego de la escena, Izquierdoz trató de bajarle los decibeles.
No hay que perder de vista que en esta serie hubo una gran polémica en el encuentro de ida disputado el martes pasado en la Bombonera. Justamente a González le anularon un tanto en el primer tiempo que debió ser convalidado y hubiera significado el 1-0 a favor del Xeneize. El árbitro colombiano Andrés Rojas, quien fue suspendido de forma indefinida después de su actuación (junto al paraguayo encargado del VAR Derlis López), señaló la mitad de cancha pero minutos más tarde dio marcha atrás y cambió su decisión una vez que verificó las repeticiones por el llamado de la cabina del VAR.
Para colmo en Belo Horizonte también se hizo presente la polémica y con el Pulpo nuevamente como protagonista: el mediocampista azul y oro intervino en una acción de bola quieta con un offside milimétrico analizado por el VAR y constatado por Ostojich. Esta acción sucedida en el complemento hizo que el match se detuviera por 8 minutos y casi se provoca un desmadre entre los protagonistas en pleno campo de juego alrededor de la pantalla del Video Ref.
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