En el Viejo Continente las selecciones continúan con su preparación de cara a la Eurocopa que paralizará a la región. El duelo más destacado se desarrolló en Niza, donde Francia se impuso con autoridad ante Gales y confirmó por qué es considerado uno de los mejores equipos del planeta.
En un espectáculo cargado de figuras, los flashes se posaron sobre Karim Benzema, la figura del Real Madrid que volvió a Le Bleu con el sueño de conquistar el próximo torneo continental y el Mundial de Qatar. Sin embargo, el histórico goleador del Merengue no tuvo su producción soñada.
A los 25 minutos del primer tiempo la estrella de la Casa Blanca tuvo la oportunidad para reescribir su historia en el combinado nacional. Tras una acción en la que el VAR determinó el penal que cometió Neco Williams por una mano indiscutible (que dejó a su equipo con inferioridad numérica, porque además el defensor observó la cartulina colorada), Benzema se hizo cargo de la pena máxima y ejecuto desde los doce pasos un disparo cruzado, potente y rasante...
El festejo del delantero se vio ahogado por la notable respuesta de Danny Ward, quien desvió el remate y mantuvo el choque igualado por unos instantes. A pesar de la oportunidad desperdiciada, Francia continuó lastimando al elenco británico y a través de la jerarquía de Kylian Mbappe, la categoría de Antoine Griezmann y el oportunismo de Ousmane Dembele concretó una cómoda victoria que confirmó su gran presente.
La decepción se dio en la presentación de los Países Bajos. La Orange rescató un empate ante un debilitado combinado escocés y el resultado volvió a despertar la preocupación en el pueblo neerlandés. Los gritos de Memphis Depay sirvieron para evitar la vergüenza, dado que el equipo liderado por Steve Clarke se había puesto en ventaja en dos ocasiones mediante los tantos de Jack Hendry y Kevin Nisbet. Es decir: el 2 a 2 no conformó a nadie.
En Noruega, en tanto, Erling Haaland evitó el papelón del conjunto escandinavo con un agónico gol en tiempo de descuento que sirvió para sellar el triunfo por la mínima diferencia frente a Luxemburgo.
Otra sorpresa se dio en el encuentro que protagonizaron Alemania y Dinamarca. Los conducidos por Joachim Low empataron 1 a 1 frente al equipo de Kasper Hjulmand y su producción llenó de interrogantes a la potencia germana. Lejos de lo que marca su historia, con los cuatro títulos mundiales, las estrellas no tuvieron brillo y el tanto de Florian Neuhaus fue emparejado por el grito de Yussuf Poulsen.
En el compromiso estuvieron presentes intérpretes de renombre como Manuel Neuer, Niklas Sule, Leroy Sane, Thomas Muller y Serge Gnabry. Sin embargo, la igualdad instaló el temor a que en la Euro vuelva a suceder el fracaso que ocurrió en Rusia, donde Alemania se despidió en primera ronda.
Finalmente, Inglaterra se impuso por la mínima diferencia en su compromiso contra Austria gracias al gol de Bukayo Saka. El combinado a cargo de Gareth Southgate cumplió con el resultado, pero no con la producción, aunque la cantidad de variantes en su formación confirmó que el estratega del Reino Unido apeló al amistoso para continuar probando a sus jugadores de cara al torneo más importante del continente.
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