La Juventus se clasificó para la próxima Champions League en la última jornada de la temporada con una victoria por 4-1 en Bologna y se unió así al Milan, al Atalanta y al Inter, campeón de la Serie A. El conjunto de Andrea Pirlo sufrió hasta incluso después del pitazo final, ya que su pasaje dependía de lo que sucedía con el Napoli, que finalmente igualó con el Hellas Verona.
El cuadro del sur, que empató 1 a 1 en el Diego Armando Maradona, tuvo que conformarse entonces con un puesto en la Europa League, al igual que Lazio.
Cristiano Ronaldo fue dejado en el banco de relevos por el técnico de la Juventus, Andrea Pirlo, que apostó por una formación ofensiva de Paulo Dybala y Álvaro Morata acompañados por Federico Chiesa y Dejan Kulusevski. Un doblete del español junto con los goles de Federico Chiesa y Adrien Rabiot le permitieron al cuadro de Turín imponerse en su compromiso y cerrar la campaña con un festejo.
Con respecto a la suplencia del portugués, el director deportivo Fabio Paratici, había explicado en la previa: “Cristiano va bien, simplemente ha disputado cinco partidos en 15 días y el miércoles fue un partido muy cansado”, en referencia a la final de la Copa Italia.
Una vez terminado el duelo, CR7 publicó en su perfil de Instagram una imagen suya en la que se lleva el índice a la boca para acallar a sus detractores. En el pie de la imagen escribió su típico grito: “Ssssiiiiimmmmm”, como celebración por haber cumplido el objetivo de llevar a la Juventus a la Champions League y evitar lo que hubiese sido un fracaso categórico.
Esta publicación llega en medio de los rumores sobre una posible salida. La prensa italiana señalaba que si el equipo no conseguía el boleto a la competición europea, el luso buscaría la manera de marcharse, pese a que tiene contrato vigente hasta junio de 2022. Incluso, un video filmado por uno de sus vecinos dio una posible pista sobre una mudanza.
Pese a no haber jugado este domingo, el luso de 37 años fue clave para su equipo esta campaña con sus 29 tantos que lo ubicaron en la cima de la tabla de anotadores. De esta manera, Cristiano se convirtió en el primer futbolista de la historia en ser máximo goleador en Serie A, Premier League y La Liga, estadística que denota su extraordinario hambre de gol y su capacidad para destruir las vallas ajenas.
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