Durante la séptima entrada del partido entre New York Mets y Atlanta Braves en las Grandes Ligas de Béisbol (MLB), un acción del juego asustó a todos: Kevin Pillar recibió un pelotazo a más de 152 kilómetros por hora y tuvo que abandonar el juego por la cantidad de sangre que tenía en el rostro. Se encuentra bien pero sufrió “múltiples fracturas” en la nariz.
Pillar, jardinero derecho de los Mets, recibió el impacto directo en la cara de una bola recta lanzada por Jacob Webb. Luego de ser atendido por los trainers de su equipo, salió caminando del terreno por sus propios medios, aunque con una gran hemorragia que taponaron con toallas. Webb se quedó en silencio con el guante en la cabeza y fue retirado del partido por el entrenador de Atlanta, Brian Snitker.
Las bases estaban llenas cuando ocurrió el incidente y James McCann anotó para darle ventaja de 2-0 a los Mets en el séptimo.
En su reemplazo debitó ingresar el novato Khalil Lee, quien entró como corredor emergente e hizo su debut en la MLB. Finalmente su equipo se impuso por 3-1 a los Braves y se mantuvo como líder de la División Central de la Liga Nacional, aunque no todas fueron buenas noticias para Pillar.
“Pillar sufrió múltiples fracturas nasales. Se reunirá con un especialista facial en Atlanta para determinar los próximos pasos”, comunicaron desde los New York Mets el martes por la mañana. El propio jugador había comunicado que estaba bien a través de las redes sociales pero tiene varias lesiones en la nariz, según la tomografía computarizada que le hizo en un hospital local.
“¡Gracias a todos los que se han acercado! Momento aterrador, ¡pero estoy bien!”, escribió Kevin Pillar, , que está bateando .250 con dos jonrones esta temporada, en su cuenta de Twitter.
“Este tipo es un guerrero; aparece todos los días para jugar duro y ustedes lo vieron: se puso de pie y se fue. No pensé que él iba a poder hacer eso. Eso es al menos es positivo a pesar del momento aterrador”, valoró Luis Rojas, el manager de los Mets.
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