El campeonato de la Fórmula 1 está al rojo vivo entre Lewis Hamilton y Max Verstappen y cada punto vale oro. No solo por la lucha entre ellos por el Campeonato Mundial de Conductores si no también por el Campeonato Mundial de Constructores entre sus equipos, Mercedes y Red Bull, respectivamente. En el Gran Premio de Portugal, donde ganó Hamilton y se aferró a la punta del torneo, hubo una polémica donde a Verstappen le quitaron el punto extra del récord de vuelta.
Fue en la última vuelta cuando el neerlandés era segundo y ya sin chances de acercarse al inglés, ingresó en los boxes y puso gomas nuevas para volver a pista con neumáticos nuevos y marcar el giro más veloz de la carrera que otorga un punto adicional. Max lo hizo, pero luego los comisarios deportivos decidieron sacarle ese registro porque pisó por el sector externo de la curva número 14 del Autódromo de Algarve, en Portimao
“Si, excedí el límite en la curva 14 ¿qué puedo hacer...?”, sostuvo Verstappen en el podio. “Es un poco extraño, porque no estaban controlando los límites de pista en la curva 14, pero da igual”, agregó en la conferencia de prensa, según informó Motorsport.
Pero según las notas actualizadas de la competencia que el Director de Carrera de la F1, Michael Masi, les hizo llegar a los equipos, indicar que “los límites de pista en la salida de la curva 14 se definen cuando ninguna parte del coche permanece en contacto con el borde rojo y blanco (los pianitos). Los pilotos deben hacer todos los esfuerzos razonables para utilizar la pista en todo momento y no pueden salirse de ella sin una razón justificada”.
Más allá de esta polémica, Max volvió a tener una dura pelea en la pista con Lewis y ambos brindaron un gran espectáculo en el inicio de la carrera con dos maniobras de antología, en las que primero el holandés superó al inglés y luego éste le devolvió la gentileza.
La otra controversia llegó en el momento que Sergio “Checo” Pérez lideró la carrera. El mexicano quedó como puntero luego del ingreso a los boxes de Hamilton. A bordo de su RB 16B de Red Bull, el mexicano se mantuvo unas cuantas vueltas como primero por haber administrado muy bien los neumáticos medios.
Pero tuvo un momento de zozobra. Fue cuando se encontró con Nikita Mazepin, que era rezagado. En una curva hacia la derecha, el ruso se cerró y el azteca tuvo que frenar de forma brusca para evitar impactar al Haas, incluso Checo bloqueó sus gomas delanteras. Luego Pérez pudo superar a Mazepin, que era el último del pelotón, y que por su maniobra y por no respetar las banderas azules (se le indica a un rezagado dejar pasar) recibió una penalización de cinco segundos.
“¡Es un idiota!”, exclamó el mexicano desde arriba de auto, cuando evitó un toque que podría haberle costado la punta de la carrera y tal vez un eventual abandono dependiendo de los daños de su monoposto. Al menos Checo pudo terminar cuarto y fue elegido como “El piloto del día”, en la votación que realizan los fanáticos por las redes sociales de la F1.
Mazepin sigue llamando la atención y no por destacarse en la pista. Logró debutar en la Máxima gracias a los billones de su padre, que fueron necesarios para la supervivencia del equipo estadounidense.
A esto se suma la competencia interna con su compañero de equipo, Mick Schumacher, hijo del séptuple campeón mundial, quien en las tres fechas disputadas demostró una mejor performance. Por ejemplo, en Portimao el alemán terminó 17º y pudo superar a Nicholas Latifi (Williams), en esa lucha del fondo entre los equipos más complicados.
Además, el germano pudo completar las tres carreras disputadas (16º en Bahreín y Emilia Romagna) y el ruso sumó un abandono en la pasada fecha corrida en Imola donde quedó afuera por un despiste en el comienzo de la carrera.
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