Al cumplir 29 años, el 6 de enero de 2022, Jesús Tecatito Corona, estudiará en detalle las ofertas que tiene su promotor Matías Bunge para emigrar a otro futbol europeo, o hasta la MLS o el mismísimo Rayados de Monterrey. Mientras tanto, no desoye el canto de ninguna sirena.
Este mismo martes 13 de abril, el delantero mexicano tendrá una nueva oportunidad de agregar rutas a su posible futuro. Porto pierde ante Chelsea en la Champions (0-2), y pretende ir a Stamford Bridge por una nueva hazaña, como la de eliminar a la Juventus en apoteósico desenlace.
Este fin de semana, en el triunfo ante el Tondela, Sergio Conceição fue relevando en el juego a algunos de sus gladiadores. Los quiere plenos este martes. Tecatito Corona está entre ellos. El mexicano sabe que lo que la pandemia le robó, el emerger entre un club poderoso de Europa, la post-pandemia puede retribuírselo.
El mismo promotor del mexicano fomenta esas serenatas de presuntos interesados en firmarlo. Como suele ocurrir, mientras más se exagera, menos creíble es, pero no por ello descartable. Se insiste en que clubes de España, la Premier, e Italia, pujan por el versátil jugador.
En 2019, el Porto hizo la gran apuesta por él. Lo blindó con una cláusula de 30 millones de euros (que este próximo verano se reduce sustancialmente), y un salario, con bonificaciones, que en un buen año, como lo fue 2020, le permite a Corona embolsarse hasta 6.2 millones de euros.
Porque, así como su osado espíritu aventurero un día cortó el cordón umbilical con Monterrey, así mismo a Corona le seduce un gran equipo de una gran liga. La antorcha para otear nuevos horizontes, sigue encendida. Especialmente si se habla del Inter de Milán, el Sevilla, el mismísimo Chelsea, el West Ham y el Wolverhampton.
Portugal suele verse como un futbol gestacional. Suele ser una plataforma hacia mejores destinos. Pero, su balompié y el país mismo, desarrollan un especial confort como para arraigarse en un paraíso para los migrantes. Aunque no es el caso del atacante mexicano.
Más allá de una exacerbada manía por magnificar el error en el juego de ida ante el Chelsea, en la Champions League, el Tecatito Corona goza de admiración en plazas europeas, y por supuesto, de privilegios afectuosos en Portugal, porque sus números y sus actuaciones lo han convertido en un mimado.
Considerado el mejor jugador de la Liga en 2020, por su actividad todo terreno, su sacrificio en defensa, y su implacable futbol ofensivo, cargado de regodeo y de regocijo para la tribuna, Tecatito tiene el respaldo de su club para ser vendido en la próxima ventana de pases, porque a partir de diciembre de 2021, Corona podría negociar con total libertad y salir del Porto, sin ningún beneficio para el club.
Reportes de Portugal indican que la junta directiva del Porto decidirá este verano si hace una propuesta para extender el contrato al jugador mexicano, a sabiendas de que resurgirán ofertas, y especialmente, esperan que tenga un buen Mundial en Qatar 2022, y eso permita engordar el caldo de las negociaciones.
Su técnico, Sergio Conceição es un admirador del Tecatito. Como el mexicano, gustaba del futbol atrevido, gambetero, generoso, explotando, porque como él, tuvo las condiciones de un extremo derecho. Por eso, en un momento dado, se convirtió en su más poderoso fiscal, aunque también en su más sincero aliado.
En 2019, el entrenador portugués encaró a Tecatito y le advirtió que ya no pretendía contar con él. No entraba en sus planes. Lejos de resignarse y lamentarse, Corona se reinventó. Cómodo en las tareas de atacante por derecha, entendió que debía renovarse o morir en la banca, o exponerse a una trasferencia indeseada.
Corona empezó a aprender, dominar y pulir las artes de la buena defensa, para agregarlas a las virtudes de un atacante encarador, desafiante, atrevido. El experimento fue un éxito. Se convirtió en un imprescindible del Porto y empezó a retintinear en los radares de otros equipos.
Con la cláusula de rescisión que tenía, y el salario que percibe, para los clubes poderosos, no parecía descabellado hacerse del delantero mexicano. Todo indicaba que en el verano de 2020 su traspaso sería consumado. Pero, la Pandemia descapitalizó a los clubes a nivel mundial. De repente, un jugador redituable, útil, se convertía en un objeto de lujo.
La contracción económica en el futbol, una recesión galopante en las finanzas de los equipos, terminó por frenar cualquier operación. Futbolísticamente, Jesús Manuel Corona fue una víctima más de la pandemia.
Según su representante Matías Bunge, aún hay clubes interesados en Corona, que siguen sus actuaciones en la Liga y en la Champions, con la esperanza de que pronto deje de convertirse en un antojo, para ser una realidad.
Pese a la insistencia de la MLS, Tecatito prefiere verlo como una última opción, e incluso, podría en un momento dado elegir regresar a México, y terminar su carrera en el club que fue su incubadora, Rayados, según reveló a TV Azteca.
“Lo tengo en mente (regresar a Rayados), ¿para qué miento? Lo tengo en mente porque es de donde salí, me gustaría volver a un club y luchar por campeonatos que es lo me lleva a estar más feliz... de ahí salí y le agarré amor al club, conocí ahí a muchas personas importantes en mi vida, como a mi esposa. Por eso, claro que me gustaría regresar a jugar a Monterrey”, dijo Jesús Manuel Corona.
Por lo pronto, el Tecatito no lleva prisa. Sus actuaciones en la Liga, y en la Champions, eliminando a la Juventus, le colocan en los aparadores europeos, pero, para su tranquilidad deportiva, emocional y familiar, sabe que hay dos boletos de primera clase en la gaveta, uno con destino a la MLS, y el otro, especialmente seductor, a Monterrey.
Por eso cobra especial importancia el juego de este martes ante Chelsea. Corona puede darle otra ‘probadita’ de sus condiciones al director técnico alemán Thomas Tuchel, quien ha confirmado el interés por firmarlo, especialmente durante el verano, cuando, según diferentes versiones, la cláusula de rescisión podría bajar de 30 millones de euros a 20 millones de euros, conforme a un acuerdo especial entre club y jugador.
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