Iban 35 minutos del Superclásico y Boca era más que River en el trámite del juego. Tras un inicio desprolijo y con el equipo muy replegado, el local pudo escapar a la presión del rival y tomó por fin contacto con la pelota del otro lado de la mitad de la cancha en donde Carlos Tevez y Sebastián Villa le generaron un problema al conjunto Millonario.
Fue allí que el Xeneize se encontró con la acción más clara del encuentro cuando logró hacer rotar el balón de derecha a izquierda y a través de Gonzalo Maroni filtró el esférico para Frank Fabra, ubicado como puntero izquierdo y a las espaldas de sus marcadores. El colombiano dominó y de inmediato lanzó el pase horizontal para que Tevez, en posición de centrodelantero lo empuje a gol, pero apareció Franco Armani para desactivar el peligro.
El arquero se vistió de héroe y cuando parecía rendido voló para tapar el débil tiro de Carlitos y llevar tranquilidad a sus compañeros y a su entrenador, que vivió la jugada con nerviosismo desde el banco de los suplentes.
Armani tuvo una atajada similar en la final de la Copa Libertadores 2018, en la ida celebrada en la Bombonera y en ese mismo arco. En aquel momento, con el tiempo cumplido y el marcador 2-2, fue Darío Benedetto el que recibió libre en el área tras una gran acción de Tevez, pero se encontró con las manos del arquero. “Le quiero cambiar el palo y agarrarlo a contrapierna y justo me sale. Esto sigue. Me voy contento por el buen rendimiento del equipo. Creo que fue justo el resultado para los dos”, dijo el delantero tras el final del partido.
Lamentablemente para Armani, minutos después de la jugada de este domingo, el árbitro Facundo Tello cobró un penal en favor de Boca y Sebastián Villa pudo vencer su resistencia para marcar el 1 a 0 con un remate potente al centro del arco. De esa manera la primera mitad terminó con el conjunto de Miguel Ángel Russo en ventaja por la mínima.
Si había alguna duda de que la atajada de la etapa inicial no había sido una casualidad, el arquero de River fue artífice de otra acción milagrosa en el complemento. Fue en un contragolpe encabezado por Maroni que definió Tevez por la derecha. El ex Atlético Nacional primero tapó el disparo con sus piernas, aunque la pelota se le escurrió de caño por la potencia y quedó bollando casi sobre la línea de gol servida para que el cordobés la empuje.
Sin embargo, en una demostración de fuerza y reflejos, nuevamente Armani apareció para cachetear la el esférico y evitar que el ex Talleres la conecte. Gracias a sus intervenciones, River pudo seguir con chances y más tarde celebró el empate a través de Agustín Palavecino.
SEGUIR LEYENDO:
El Superclásico entre Boca y River terminó 1 a 1