Emanuel David Ginóbili, el basquetbolista argentino más destacado de la historia, vivió un reconocimiento reservado para pocos, dado que el bahiense ingresó al Salón de la Fama de la NBA en los Estados Unidos, lo que significó una jornada histórica. La leyenda de 45 años fue homenajeado en el James Naismith Basketball Hall of Fame de la ciudad de Springfield, estado de Massachusetts, en una ceremonia que quedará en la memoria colectiva de sus fanáticos.
La distinción a la que accedió Manu (retirado en agosto de 2018) fue inédita, dado que se convirtió en el cuarto jugador sudamericano en recibir el premio. Los tres anteriores son brasileños: Oscar Schmidt (2013), Maciel ‘Ubiratán’ Pereira (2010) y Hortencia de Fátima Marcari (2005), por la WNBA (la Asociación que engloba al básquetbol femenino en los EEUU).
Dos de sus laderos perfectos en los San Antonio Spurs (en la que revistó y sobresalió a lo largo de sus 16 temporadas) fueron quienes lo acompañaron durante la ceremonia. Tim Duncan fue el presentador y el francés Tony Parker se desempeñó como una suerte de asistente, tal como ocurrió en el rectángulo de juego durante la mayoría de los encuentros que compartió el denominado Big Three.
Ginóbili estuvo acompañado por su esposa, Marianela, y sus hijos. Y para la ocasión se visitó con una zapatillas especiales que recuerdan su gloria con fechas que están grabadas a fuego a lo largo de su carrera.
Además, Lionel Messi, crack del seleccionado argentino de fútbol que disputará la próxima Copa del Mundo Qatar 2022 con 35 años, manifestó su “orgullo” por la distinción que recibió el bahiense. A través de sus distintas redes sociales, el futbolista rosarino se expresó y dijo: “Me provoca mucho orgullo escuchar a un periodista decir que ‘Manu’ (Ginóbili) es el Messi del básquetbol”.
“De hecho deberían decir que yo soy el ‘Manu’ del fútbol” ironizó el delantero del París Saint Germain francés, quien tuvo una gran actuación en la victoria por la mínima diferencia sobre el Brest, enun duelo correspondiente a la Liga 1.
Cabe señalar que otros cinco basquetbolistas y directores técnicos inscribieron sus nombres en el Salón de la Fama, pero nunca se vivió una ovación generalizada como la que se desarrolló anoche cuando en los parlantes se escuchó el nombre de Emmanuel Ginóbili. Además de Manu, Fabricio Oberto (compañero del bahiense en el San Antonio Spurs campeón en 2007), Oscar Furlong y Ricardo González (campeones mundiales con el seleccionado argentino en 1950) más los entrenadores Jorge Canavesi (al frente del equipo argentino que se consagró en el Luna Park hace más de 70 años) y Rubén Magnano (DT del equipo ganador de la medalla de oro en los Juegos Olímpicos Atenas 2004).
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