Si bien volvió a vestir la camiseta del Manchester United, el futuro de Cristiano Ronaldo continúa siendo una incógnita. Y los gestos del delantero, de 37 años, abonan la incertidumbre. El portugués participó del amistoso que este domingo los Diablos Rojos igualaron 1-1 ante el Rayo Vallecano en Old Trafford. Pero una actitud suya lo puso en el blanco de las críticas.
Luego de no haber participado de la gira de pretemporada por Asia y Oceanía por “problemas personales” (en el medio le indicó a su representante Jorge Mendes que buscara una salida), CR7, con un año pendiente de contrato con el United, se reintegró a las prácticas y tuvo su primer ensayo formal con público. Había dudas respecto de cómo iba a reaccionar el fanático del club ante la novela del mercado de pases, sin embargo, Cristiano aplaudió a la afición apenas asomó en el campo de juego y recibió cariño como respuesta.
De todos modos, no exhibió un buen rendimiento en una formación que combinó figuras como CR7 y Raphael Varane, jóvenes como Alejandro Garnacho e incorporaciones como Christian Eriksen y Lisandro Martínez. El grueso de los titulares había participado del duelo ante el Atlético Madrid del sábado (caída por 1 a 0).
Jugó solo 45 minutos, no desequilibró (incluso desaprovechó una oportunidad clara para convertir) y hasta se lo vio encogerse de hombros ante las indicaciones del orientador Erik ten Hag en una de las pausas en el cotejo para que los futbolistas se hidrataran.
Tras el entretiempo, el director técnico lo reemplazó por Amad Diallo Traore, quien a la postre terminó marcando el gol del United tras un rebote. En una prueba es normal que las modificaciones sean cuantiosas. En la medida que fueron siendo reemplazados, los futbolistas se fueron quedando en el banco a observar la continuidad del cotejo. Pero Ronaldo, no.
Por el contrario, se quedó en camerinos, se bañó y a 10 minutos del final fue captado por fanáticos saliendo de Old Trafford con una mochila sobre su hombro, desentendiéndose de la suerte de su equipo, hecho por el que recibió críticas en las redes sociales.
En el umbral del Mundial de Qatar, al que concurrirá para defender al seleccionado luso, el deseo de Cristiano es jugar en una institución que dispute la Champions League, mientras que el United clasificó para la Europa League. Mendes, su agente, lo ofreció en diferentes clubes de élite, como el PSG, Barcelona o el Bayern Múnich, incluso aceptando una disminución de sus ingresos, pero no logró conseguir un oferente que además realice una erogación en cuanto a su ficha para convencer a los Diablos Rojos de desprenderse de su figura.
En los últimos días tomó fuerza la opción Atlético Madrid, aunque aún no hubo un ofrecimiento formal. Mientras, el calendario no ayuda a CR7: el Manchester United iniciará su temporada 2022/23 el domingo 7 de agosto cuando reciba al Brighton And Hove en Old Trafford.
SEGUIR LEYENDO: