El andar de Boca Juniors corría con total normalidad en la temporada hasta la eliminación en los octavos de final de la Copa Libertadores por parte del Corinthians. En el encuentro de vuelta, Darío Benedetto falló dos penales fundamentales que podrían haber significado la clasificación del Xeneize y desde ese entonces se generó una grieta entre los hinchas y su amor hacia el delantero. La situación se agravó por la pelea entre el plantel y el Consejo de Fútbol por una falta de acuerdo en los premios y aún peor con la caída frente a San Lorenzo.
Luego de la derrota, el periodista Leandro Aguilera publicó la foto del controvertido festejo entre Marcos Rojo y Carlos Izquierdoz en el duelo frente al Ciclón con el siguiente epígrafe. “Una imagen que vale más que 1000 palabras”, redactó. De manera repentina apareció Lucas Benedetto, hermano del Pipa, quien hizo estallar a los fanáticos xeneizes con su respuesta: “El Romance se terminó hace muchos años, pero no todos se dieron cuenta! Aguante Boca”. Si bien luego borró la publicación, las capturas inundaron las redes sociales.
La problemática comenzó a asomar segundos antes del inicio del partido en la Bombonera frente al Corinthians cuando una de las cámaras de la transmisión captó la arenga previa de Darío a pocos escalones de pisar el césped. “Una cosa, ayer nos trataron de perdedores. Ayer nos trataron de perdedores. Así que demostremoslé a estos hijos de puta que nosotros queremos ganar. Que nosotros somos ganadores”, exclamó el goleador en el túnel ante la mirada de sus compañeros. Este mensaje tenía un claro destinatario, el Consejo de Fútbol con el que habían tenido fuertes careos por una cuestión de premios adeudados y el porcentaje que cobrarían por la presente edición de la Copa Libertadores.
Como si fuera poco la conflictiva situación, Lucas Benedetto apareció para agregar más leña al fuego. El despido de Sebastián Battaglia de la dirección técnica del club sucedió de manera repentina y los cambios pegaron aún más cuando el nuevo cuerpo técnico conformado por Hugo Ibarra, Leandro Gracián y Mariano Herrón decidieron sacar del equipo titular al capitán, Carlos Izquierdoz, quien, como capitán y voz cantante del plantel, habría tenido una fuerte discusión con la dirigencia en dichas reuniones.
La modificación no habría caído bien dentro del plantel y se volvió pública cuando Rojo buscó al Cali en su festejo de gol frente a San Lorenzo. Las versiones indicaban que un conflicto entre los referentes del plantel y la directiva se había desatado horas antes del choque trascendental ante Corinthians. La prueba que realizó Ibarra en la práctica con Zambrano en la última línea le dio mayor fuerza a estos rumores, ya que Izquierdoz fue el capitán durante el ciclo Battaglia.
El viernes por la noche, el Cali publicó un contundente mensaje en sus redes sociales: “No crean todo lo que se dice. Si acepté quedarme hasta diciembre fue solamente porque quería ganar la copa y lo mismo corre para mis compañeros. Una pena que no se dio, pero no me quiero ir y que piensen cosas que no son”. Tres derrotas consecutivas en la Liga Profesional complican las aspiraciones de Boca en el certamen y el club necesita soluciones urgentes si no quiere lamentarse en un futuro próximo.
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