Ser hijo de una leyenda deportiva no es fácil. Las comparaciones surgen inmediatamente y hay muy pocos casos de hijos de padres famosos que hayan podido estar a la altura de lo esperado o, al menos, trascender. Hoy en día hay ejemplos, ¿quién no ha oído hablar del parecido entre Tiger Woods y su hijo Charlie? ¿O de la pequeña de Serena Williams y su talento al empuñar la raqueta? Yendo puntualmente al básquet hay muchos casos de hijos que han transitado el camino con éxito. O lo están haciendo en este momento. Desde el más famoso, el gran Kobe Bryant, quien terminó siendo claramente mejor que su padre Joe, hasta Gary Payton II, primogénito del Guante –aquel base estrella de los 90- que se destacó en las finales de la NBA con los Warriors, aunque sin llegar al alto nivel de su padre. En total son 90 familias con dupla de padre-hijo y, en las gateras, hay cuatro más que asoman en el horizonte, que por sus apellidos y talento generan una expectativa grande. Acá vamos a conocer a los hijos de Shaquille O’Neal, Scottie Pippen (ambos se declararon elegibles para el draft 2022), Dwyane Wade, LeBron James y Ron Harper. Cómo juegan y qué potencial tienen a futuro.
Hasta ahora, en la NBA, ha habido para todos los gustos, incluyendo cuatro casos en los que dos hijos alcanzaron la NBA, como pasó con los Curry (papá Dell y los chicos Steph y Seth), los Paxson (Jim, Jimmy y John), los Thompson (Mychal, Klay y Mychel) y los Grant (Harvey, Jerian y Jeremy). Y un caso impactante en el que tres llegaron a la élite mundial, como fueron Jon, Brent y Drew Barry, hijos de Rick, el ocho veces All Star. Todo comenzó en 1966, cuando debutó Matt Guokas Jr y así se dio la primera ocasión en la que padre e hijo tenían minutos en la NBA. El papá había jugado en los años 40 y ambos ganaron un campeonato. Luego hubo dos más que alcanzaron ese hito, Rick y Brent Barry. Y, por último, Bill y Luke Walton. En la actualidad, Gary Payton II, Devin Booker, Jalen Brunson, Jae Crowder, Tim Hardaway Jr, Austin Rivers, Bol Bol y Darius Garland tienen un padre que haya jugado antes en la NBA.
Varios se pueden sumar en breve. En estos días fueron noticias dos de ellos. Scotty Pippen Jr y Shareef O’Neal, hijos de dos de los (20) mejores jugadores de la historia, aunque también hay que sumar a Ron Harper Jr, hijo del padre con el mismo nombre quien fuera importante figura durante su primera década NBA (rondó los 20 puntos, 6 asistencias y 6 rebotes de promedio entre 1988 y 1994) y luego resultó un complemento esencial de MJ y aquellos Bulls del segundo tricampeonato (96-98).
Scottie Pippen Jr
El hijo del seis veces campeón de la NBA fue el máximo anotador de la Conferencia Sureste y segundo goleador del bravo Torneo SEC en su segundo año, con un promedio de 20.4 puntos, siendo elegido nuevamente en el quinteto ideal. Durante la temporada en cinco ocasiones anotó 30 o más, estableciendo un récord para la Universidad de Vanderbilt con 736 puntos en 36 partidos. El equipo, con él como líder, terminó con marca de 19-17 y perdió en cuartos de final del Torneo NIT –segundo en importancia- de la NCAA. Se trata de un armador de 21 años y mediana estatura (1m87) que puede anotar (estuvo arriba de los 20 puntos en últimas dos campañas), con buenos instintos defensivos como su padre -1.9 robo en la 21/22, aunque le falta regularidad- y algunos recursos en el pase (4.5 asistencias). Claro, si recordamos al padre, un alero (2m01) versátil, brillante en defensa y con recursos variados en ataque, el gran complemento de Jordan, el hijo no se parece mucho. Es más bajo, pero destaca por su fortaleza física y capacidad para meter puntos. Penetra muy bien, tiene buena media distancia y saca muchas faltas –tomó 8.3 por juego, siendo el líder de toda la NCAA-. Le falta mejorar la visión, el pase y la eficacia en triples -34% en su carrera universitaria-, pero tiene chances de ser elegido en el draft de este jueves, en especial en segunda ronda.
Shareef O’Neal
El hijo mayor del gran Shaq viene de jugar tres años en la NCAA, primero con UCLA y luego con LSU, donde su padre comenzó a dominar… Pero, claro, como pasa en muchos casos, es imposible la comparación con el padre, porque está lejos de tener su físico y talento. Viene de jugar poco (9 minutos de promedio) con números descartables: 2.9 puntos y 2.1 rebotes. Se trata de un ala pivote de 2m08 y 22 años que, cuando estaba en la secundaria, pintaba muy bien, pero ha tenido problemas de lesiones y se ha detenido su progreso. Lo mejor que tiene es su movilidad y versatilidad, que le permiten correr bien la cancha y llegar a algunos tapones. Pero, claro, para ser un hombre grande hoy en día, le falta tiro en todo sentido (20% en triples y 47% en libres) y entendimiento del juego. Sería sorprendente si alguien lo selecciona para el famoso draft en el que Orlando Magic tendrá el N° 1.
Ron Harper Jr
Ron Harper padre fue un escolta muy anotador en sus primeros seis años en la NBA y luego, como veterano, un base armador, alto, con oficio e inteligencia que ayudó a los Bulls de Jordan en el segundo tricampeonato. El hijo juega en otra posición. Es un alero, tirando a ala pivote, algo bajo (1m97) que jugó las cuatro temporadas posibles en la NCAA, puntualmente en Rutgers. En la 21/22 promedió 15.8 puntos, 5.9 rebotes y 1.9 asistencia, con un respetable 40% triples. Su problema es básicamente físico: está excedido de peso, no es lo suficientemente alto y fuerte para el nivel NBA. Pero, a la vez, tiene buena envergadura y potencia, capaz de anotar de diversas formas, desde el posteo al juego de frente por su buen lanzamiento. En defensa no dio ventajas, pero habrá que ver en qué puesto puede jugar en la NBA, porque para alero le falta agilidad y velocidad, mientras que para ala pivote carece de talla. Es candidato a ser elegido en los últimos puestos de segunda ronda, aunque no sorprendería que no sea seleccionado y deba ir a ganarse un lugar en los campus o en ligas de verano, a partir de septiembre.
Bronny James
El hijo mayor del Rey tiene 17 años, le quedan varios años para tener su chance NBA, pero muestra el talento como para ser tenido en cuenta. Nacido en Cleveland, en 2004, jugó al fútbol y al básquet, solamente, porque su padre le prohibió probar con el fútbol americano y el hóckey sobre hielo por cuestiones de seguridad. A los 13 se decantó definitivamente por el deporte que por años gobernó su padre. Comenzó su carrera en la secundaria Crossroads de Santa Mónica y, a mediados de 2019, se transfirió al famoso high school Sierra Canyon (en Chatsworth, California), donde cada año van prospectos importantes, como los hermanos Collins, Marvin Bagley y Cassius Stanley. Por estos años no es la excepción y es tanto el talento que Bronny ni siquiera es hoy la joya del equipo. En esta última temporada, en la que el equipo tuvo marca de 24-4, lo fue Amari Bailey, quien ya se comprometió para jugar en UCLA.
Bronny es un base de 1m90 que la temporada pasada tuvo altibajos, con algunos partidos muy buenos y otros, flojos. Promedió 7.2 puntos, 2.6 rebotes y 2.5 asistencias. Números nada impactantes. Eso sí, aún es joven y le queda un año más de secundario. Aún no está claro dónde seguirá después, aunque hay reportes que aseguran que cinco universidades top están interesados en él: Duke, Kansas, Kentucky –única que le ofreció una beca oficialmente-, UCLA y North Carolina. Tampoco hay que descartar que tome otra dirección ya que en los últimos años se ha visto cómo prospectos importantes han jugado en el exterior o en la G-League.
LeBron impactó a todos, en febrero pasado, cuando dijo que iba a jugar su último año con su hijo. “Donde sea que Bronny esté, ahí estaré. Haré lo que sea para jugar un año con mi hijo”, declaró. James junior podría participar del draft recién en 2024, si se mantienen las reglas de que la edad mínima de ingreso sean 19 años. LeBron será agente libre sin restricciones en 2023 y ahí podrá definir, sin ataduras, dónde se encontrará con Bronny, viendo el nivel de su hijo y las opciones.
Zaire Wade
El hijo de Dwyane, mítica estrella del Heat y sobrino de LeBron, tiene 20 años, mide 1m90 y juega de base. Compartió un año con Bronny en Sierra Canyon y como no tuvo grandes ofertas de universidades, resolvió jugar en la G-League, la liga de desarrollo en la NBA. Fichó con Salt Lake City Stars, la filial de Utah Jazz, luego de ser elegido en la décima posición del draft del torneo. Claro, no sorprendió porque su padre es dueño minoritario del Jazz. Pero la carrera profesional de Zaire no ha arrancado de la mejor manera. En la temporada jugó sólo 12 de los 32 partidos del equipo, con promedios de 19 minutos, 1.8 punto, 2.5 rebotes y 1.3 asistencia. Todo pese a que el conjunto terminó último en su conferencia. Wade, que pintaba como un mejor prospecto hace unos años, necesita mejorar para poder aspirar a ser tenido en cuenta en el draft de la NBA, a partir del 2023, cuando será elegible. O, de lo contrario, intentar el camino desde las ligas de verano, donde las franquicias prueban jugadores para completar sus planteles de 15.
Estos son cinco prospectos, pero no son los únicos. Kiyan Anthony, el hijo de Carmelo, tiene 15, mide 1m88 y pinta bien. Anunció que jugará en el secundario Christ the King en Queens, NY. Eso sí, todos enfrentan lo mismo: ser hijos de leyendas y ser comparados permanentemente con sus padres, además de la dificultad propia de llegar donde muy pocos…
De padres a hijos
Seth Curry (Nets) y Stephen Curry (Warriors)
Dell Curry fue el Mejor Sexto Hombre en 1994 y eximio tirador entre los 80 y 90. Hoy es un analista de TV para los Hornets.
Klay Thompson (Warriors)
Mychal Thompson fue el pick N° 1 del draft de 1978 y dos veces campeón con los Lakers de Magic Johnson.
Gary Payton II (Warriors)
Hijo de aquel base famoso de los Sonics que fue campeón con Miami y llegó al Salón de la Fama luego de nueve elecciones al All Star y al quinteto ideal defensivo de una temporada
Andrew Wiggins (Warriors)
Mitchell Wiggins fue un escolta que jugó para los Bulls, los Rockets y los 76ers durante una carrera de seis temporadas.
Domantas Sabonis (Kings)
Hijo del gran Arvydas, aquel pivote lituano de 2m22 que brillara en Europa antes de llegar a la NBA. Promedió 12.0 puntos y 7.3 rebotes en siete temporadas con los Blazers, pero dejó su huella por su juego distinto.
Austin Rivers (Nuggets)
Doc Rivers, actual coach de 76ers, fue un base importante durante 13 años en la NBA.
Justise Winslow (Clippers)
Rickie jugó sólo siete partidos en los Bucks durante la temporada 1987-88.
Gary Trent Jr. (Raptors)
Gary padre, un ala pivote fuerte y potente, fue elegido en el lugar N° 1 del draft de 1995 y jugó 9 años en la NBA
Al Horford (Celtics)
Tito, dominicano, jugó 63 partidos en tres temporadas, sobre todo en los Bucks. Fue el primer dominicano y uno de los primeros latinos en jugar en la NBA. Un pivote de 2m16.
Jaren Jackson Jr. (Grizzlies)
Jaren Jackson Sr ganó un título con los Spurs, en 1999
Ed Davis (Cavaliers)
El papá, Terry Davis, jugó en el Heat, Mavericks, Wizards y Nuggets durante 10 temporadas en total
Darius Garland (Cavaliers)
Winston fue un base que pasó por los Warriors, Clippers, Nuggets, Rockets y Timberwolves.
Jerami Grant (Pistons)
Harvey Grant fue un ala pivote que jugó en los 80, durante 11 temporadas: Wizards, Trail Blazers y 76ers.
Tim Hardaway Jr. (Mavericks)
Hijo de una estrella de los 80 como Tim Hardaway Sr, base muy ofensivo que dejó su huella y fue elegido cinco veces para el All Star y otras cinco para los quintetos de la NBA.
Cole Anthony (Magic)
Greg Anthony fue un base fuerte y defensivo que jugó en los 90: Knicks, Grizzlies, SuperSonics, Trail Blazers, Bulls y Bucks (11 temporadas).
Bol Bol (Magic)
Hijo del gran Manute, aquel pivote sudanés de 2m31 que fue el líder en tapones en las temporadas 1985-86 y 1988-89.
Devin Booker (Suns)
Melvin jugó apenas 32 partidos en dos temporadas.
Jalen Brunson (Mavericks)
Rick jugó para los Trail Blazers, Knicks, Celtics, Bulls, Raptors, Clippers, SuperSonics y Rockets durante nueve temporadas.
Amir Coffey (Clippers)
Richard jugó en los Timberwolves en la temporada 1990-91.
Nicolas Claxton (Nets)
Charles sólo entró en tres partidos en los Celtics de la 1995-96.
Jae Crowder (Suns)
Corey Crowder jugó 58 partidos en dos temporadas (Jazz y Spurs).
Luke Kornet (Celtics)
Frank jugó 89 partidos con los Bucks entre 1989 y 1991.
Kevin Love (Cavaliers)
Stan Love disputó en 227 partidos en cuatro temporadas, además de 12 en la ABA.
Kenyon Martin Jr. (Rockets)
Kenyon Martin Sr fue el pick N° 1 del draft 2000. Un ala pivote versátil que fue elegido una vez para el All Star y disfrutó de una carrera de 15 años en la NBA.
Wesley Matthews (Bucks)
Wes ganó dos títulos con los Lakers en 1987 y 1988. Jugó nueve temporadas.
Larry Nance Jr (Pelicans)
Larry Nance Sr. fue un muy buen ala pivote en los 80, con gran potencia y salto. Llegó a tres All-Star y tres veces estuvo en el quinteto defensivo.
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