Llega el PGA Championship, segunda gran parada de la temporada de golf: la presencia de Tiger Woods y el nombre que promete eclipsarlo

El golf tiene repartidos sus grandes eventos a lo largo del calendario. Así en abril tenemos el Masters en Augusta, en mayo es el turno del PGA Championship, en junio llega el US Open y en julio se disputa The Open en Gran Bretaña. Estos son los cuatro campeonatos que conforman el Grand Slam y son los que todos sueñan con ganar.

Esto no fue siempre así porque normalmente el PGA Championship se jugaba en agosto, pero hubo algunos temas que obligaron a un cambio de calendario. En primer lugar, el PGA Tour quería cerrar la temporada antes de que comenzara la NFL en Estados Unidos (septiembre) y con el PGA a mediados de agosto eso era imposible. Otro tema fue la vuelta del golf a los Juegos Olímpicos, que normalmente son para ese mismo mes. La mejor solución fue entonces mandar el PGA Championship a mayo y regresar el Players a su fecha original de marzo (entre 2007 y 2018 se había jugado en mayo)

La edición 104 del PGA Championship se jugará una vez más en la cancha de Southern Hills ubicada en Tulsa, Oklahoma, y varias historias rodean al segundo major de 2022. Algunas referidas al campeonato y sus participantes, otras tienen más que ver con el conflicto entre el PGA Tour y la nueva liga financiada por capitales árabes. Vamos por partes.

Durante la semana del Masters hablamos de Rory McIlroy y su posibilidad de sumarse al exclusivo club que conforman los que han ganado alguna vez en sus carreras los 4 campeonatos mayores. Ese club tiene solo cinco integrantes (Gene Sarazen, Ben Hogan, Gary Player, Jack Nicklaus y Tiger Woods). Le pasó cerca este año, pero McIlroy tendrá que esperar un año más para ver si puede ponerse el saco verde y ser el sexto jugador en la historia en lograr ingresar al club. La semana que viene le tocará el turno a Jordan Spieth, que luego de ganar el Masters y US Open en 2015, sumó The Open en 2017 y solo le resta ganar el PGA Championship. Spieth ganó hace pocas semanas en Hilton Head un torneo del tour y llega en buena forma al segundo major del año. Ha estado haciendo algunos cambios en su swing para buscar mayor solidez de tee a green, y si bien se lo nota algo incómodo en su swing, el triunfo validó esos cambios. Esta semana juega en Dallas, su ciudad, y podremos tener una idea más clara de cómo está su juego.

Tiger Woods es siempre la estrella cuando se presenta en un campeonato. Luego de su vuelta al golf en Augusta dejó en duda su participación en el PGA Championship, pero hace un par de semanas, cuando hizo una visita a Southern Hills, quedó clara su intención de participar. Es el mismo escenario en donde ganó en 2007 su tercer título en el PGA Championship, pero la cancha ha sufrido cambios en estos últimos años. El diseño original es de Perry Maxwell y abrió en 1936, pero en 2019 el arquitecto Gil Hanse (el mismo que diseñó la cancha olímpica en Río de Janeiro) metió mano para devolverle el carácter original, además de agregarle algunas yardas para ponerla a tono con las distancias que hoy alcanzan los mejores del mundo.

Si se preguntan cómo llega Tiger al PGA Championship, la respuesta es que no sabemos mucho. Su vuelta en la “semana Masters” fue mejor de la que muchos pronosticaron y un mes más tarde su pierna debería estar un poquito mejor. Southern Hills es una cancha con cambios de nivel en donde su pierna volverá a ser puesta a prueba, pero nada tan demandante como Augusta. Una cancha que pone a prueba todos los aspectos del juego, siendo quizás uno de los trazados menos valorados por el público en general. Tiger Woods será la atracción principal en el PGA Championship, pero hay otro caballero que también atraerá la atención del público.

A punto de cumplir los 52 años Phil Mickelson no juega desde hace casi 4 meses. Un año atrás sorprendió al mundo al ganar el PGA Championship en Kiawah Island y convertirse en el ganador de major de más edad en la historia. Digo sorpresa porque su juego había estado lejos de ser brillante y su mejor actuación había sido un top 25 en el Masters de 2021. Pero los “cracks” tienen esas cosas.

Mickelson tomó la delantera luego de 54 hoyos y el domingo vio cómo uno a uno sus rivales se iban desmoronando para terminar imponiéndose por dos golpes. Todo parecía encaminarse en la vida del zurdo, pero poco a poco los rumores de su asociación con la nueva liga financiada por los árabes, sumados a que sus problemas con las apuestas deportivas empezaron a salir a la luz, hicieron que el resto del año fuese más noticia fuera que dentro de la cancha.

Todo empeoró a comienzos de 2022 cuando en unas fuertes declaraciones Mickelson criticó con dureza al PGA Tour. Allí el resto de los jugadores salieron a defender al circuito y a desacreditar los dichos de Mickelson. El zurdo se vio acorralado cuando el escritor y periodista Alan Shipnuck hizo públicos extractos de su nuevo libro, una biografía no autorizada de Mickelson, en donde el jugador se expresa con todo contra el gobierno saudí, pero admitía que era una oportunidad económica que no iba a dejar pasar. El libro, que estará en las librerías el martes próximo, cuenta también que durante una auditoría que le hizo la IRS (agencia impositiva de USA), se le contabilizaron pérdidas por 40 millones de dólares relacionadas a apuestas deportivas, solo entre 2010 y 2014.

Así, luego de casi cuatro meses de ausencia y de un comunicado en el que el jugador anunciaba que se iba a tomar un descanso para resolver temas personales, Phil Mickelson vuelve la semana próxima para defender el título en el PGA Championship. Queda claro que la conferencia de prensa que el último campeón brinde durante la semana del campeonato tendrá auditorio completo.

Espero no haberlos aburrido con esta previa, pero como verán hay muchos temas para la segunda gran semana del año. Todavía no mencione al número 1 del mundo, Scottie Scheffler, que luego de su triunfo en Augusta llega también como candidato. De Scheffler y de todo lo que ocurra en el PGA Championship nos ocuparemos a partir del martes.

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