Seis tenistas españoles y una jugadora oriunda de Kirguistán han recibido graves sanciones por participar en amaños de partidos. La Agencia Internacional para la Integridad del Tenis (ITIA) los ha inhabilitado para jugar o participar en este deporte por periodos que van desde siete a los 22 años, según comunicó este organismo en las últimas horas. En el caso de los varones, los han vinculado con “una de las mayores tramas que se han visto”.
La ITIA le dio una suspensión de 16 años, seis de ellos con aplazamiento en el cumplimiento, y una multa de USD 100.000 para la jugadora Ksenia Palkina, que llegó a ser 164° del ranking mundial en 2010 y estaba suspendida de manera provisional desde noviembre de 2019. La jugadora kirguís de 32 años, que reconoció haber amañado partidos en 2018 y 2019, podría regresar al circuito, como muy pronto, en noviembre de 2029.
Por otra parte, entre los jugadores españoles, el mayor castigo ha recaído sobre Marc Fornell, quien ocupaba el puesto 236 de la clasificación ATP y ha sido inhabilitado para el tenis durante 22 años y seis meses, además de que se le ha impusto una multa de USD 250.000, con USD 200.000 de suspensión. En un juicio celebrado este último miércoles en la Audiencia Nacional, Fornell y el resto de los implicados ya habían reconocido los hechos.
“Los seis jugadores fueron condenados en España como parte de un caso más amplio relacionado con la delincuencia organizada, que continúa”, indicó la ITIA.
La lista de jugadores “expulsados del deporte” la completan Jorge Marsé, quien era el 562° del ránking ATP, y los no clasificados Carlos Ortega, Jaime Ortega, Marcos Torralbo y Pedro Bernabé Franco, que se declararon culpables de cargos de corrupción en España, lo que dio lugar a condenas penales. Todos ellos jugadores fueron condenados a dos años de prisión en suspenso, así como a una multa.
“Una vez concluidas las causas penales, la ITIA ha podido sancionar a los jugadores y les ha impuesto tanto prohibiciones de larga duración como sanciones económicas”, indicó este organismo independiente, creado por los organismos rectores del tenis para salvaguardar su integridad.
Marsé no podrá jugar al tenis durante 15 años y se le impondrá una multa de USD 15.000, con una suspensión de USD 5.000. La misma cantidad de años le cayeron a Carlos Ortega, Bernabé Franco y Tarralbo, aunque con diferentes multas económicas. A su vez, Jaime Ortega fue sancionado con 7 años y seis meses de suspensión del tenis, más la multa de USD 100.000, con USD 90.000 de suspensión.
Las sanciones implican la prohibición de jugar o asistir a cualquier torneo de tenis autorizado o sancionado por cualquier organismo rector del tenis internacional o federación nacional. Tampoco podrán entrenar en el deporte profesional.
“La conclusión de esta larga investigación es un momento importante para el tenis en su lucha contra la corrupción. Aunque no nos complace ver que seis individuos reciban condenas e inhabilitaciones penales, el mensaje es claro: el amaño de partidos puede llevar a una sentencia de cárcel y puede acabar con la carrera en el tenis”, comentó Jennie Price, presidenta de la ITIA.
Jonny Gray, director general de la ITIA, indicó que se trataba de “una de las infiltraciones más importantes que hemos visto en el tenis por parte de la delincuencia organizada”.
Las sentencias marcan el final de un proceso de cinco años en el que han colaborado la ITIA, las fuerzas del orden españolas y la industria de las apuestas, a través de la Asociación Internacional de Integridad de las Apuestas (IBIA). La manipulación de resultados, con jugadores o jugadoras que reciban dinero por perder voluntariamente un partido, permite a apostantes ganar grandes cantidades de dinero, a menudo utilizando torneos secundarios.
(Con información de EFE y AFP)
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