El París Saint Germain parece que finalmente logró pasar de página tras la eliminación de la Champions League en manos del Real Madrid. Rumbo a un nuevo título de la Ligue 1, en los últimos dos encuentros del cuadro de la capital se vio la mejor versión del tridente de ataque Messi, Mbappé y Neymar. Con 11 goles en total en los duelo frente al Lorient y Clermont, en Francia aseguran que la dupla sudamericana habría aceptado su rol de acompañantes para hacer brillar al delantero de Les Bleus.
Entre su llegada tardía al club, los constantes viajes para estar junto a la selección argentina y algunas molestias físicas por la carga de partidos, Lionel Messi no tendría la misma influencia en París que la que alguna vez tuvo en el vestuario del Barcelona según afirmó el periodista Dominique Sévérac en el diario Le Parisien. Más allá del rol central que naturalmente ocupa, el argentino se mostró consciente del diagrama parisino: no se encerró en su posición de ataque y buscó acomodarse. Su lugar en el terreno de juego, al que se ha adaptado pero que en ocasiones le cuestiona sobre su uso más eficaz, indica un retroceso en el campo respecto a los últimos años.
Según informó Le Parisien, Mauricio Pochettino ve a su compatriota más como un mediocentro que como un goleador, manteniéndolo alejado del área donde ya se convirtió en una zona exclusiva reservada para Kylian Mbappé que acumula un total de 20 anotaciones y 14 asistencias en lo que va de la temporada. Con este enfoque, la sociedad de Messi con el delantero francés es cada vez mejor y los roles se diferencian partido a partido dentro de la cancha: de sus trece pases gol, la Pulga repartió seis para la Tortuga.
En un principio, Mbappé adoptó un papel secundario mostrando predisposición para alinear al tridente que todo el mundo temía ante la presencia de Neymar en el equipo –el salario más alto del club– y la contratación de Lionel. Su admiración por Messi se volvió pública y apoyó el proyecto deportivo que trajo la dirigencia de Nasser Al-Khelaïfi a la capital. Pero luego de meses de irregularidad de las dos estrellas sudamericanas, Kylian dio el paso al frente y se plantó como capitán del barco en la ofensiva, según el informe del medio francés.
La desaparición de Neymar Jr. durante dos meses y medio de la temporada a causa de un esguince de tobillo el 28 de noviembre en Saint-Étienne fortaleció la relación entre el argentino y el francés. Aunque el brasileño levantó su rendimiento en los últimos partidos, el grosor del juego pasa por los pies de la dupla. El medio francés reveló que puertas para adentro, los dos extremos ya ven a Mbappé como el líder en la ofensiva y que le deben otorgar en cada encuentro las mejores herramientas posibles.
A mediados de 2021, quien hizo un análisis similar a lo que terminó sucediendo fue Nicolas Anelka. “Mbappé tiene que ser el jefe del ataque porque es el número uno. Messi lo era en el Barça, pero ahora tiene que servir a Mbappé. Lleva cinco años en el club y eso Messi tiene que respetarlo”, dijo el ex delantero Nicolás Anelka en una entrevista que le concedió al diario francés Le Parisien.
Y concluyó al respecto: “Es insustituible Mbappé, en velocidad es el mejor del mundo y el PSG debe hacer todo para que se quede. Pero yo creo que ya lo tiene decidido. Quiere más y es normal. Si hubiera jugado sus tres últimas temporadas en Inglaterra o España ya habría sido Balón de Oro. Si se va, habrá que agradecerle todo”. Al final, el tiempo le terminó dando la razón.
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