Terminó el sábado la tercera ronda del Masters y quedaron definidos quienes quedaron sin posibilidades de ganar y quienes pelearán por el saco verde, uno de los premios más codiciados en el mundo del deporte, además de llevarse un jugoso cheque. Antes de meternos en lo que pasó en el frío sábado de Augusta, creo que vale la pena detenerse y contar otras dos tradiciones del Masters.
Una de ellas habla que el club no anuncia sino hasta el domingo al mediodía la bolsa total de premios. Lo único que sí se sabe es que siempre será mayor a la del año anterior, que en este caso fue de 11.5 millones de dólares. Pensar que rondará los 12 millones sería muy acertado, de los cuales 2,16 le corresponderá al ganador. La otra tradición sucede en la ceremonia de entrega de premios cuando el campeón defensor le coloca el saco verde al nuevo ganador.
El saco es distintivo de los socios del club y en 1937 Bobby Jones les sugirió a los socios del club que vistieran el saco durante la semana para poder ayudar a los espectadores a ubicarse en la cancha. En 1949 nació la tradición de entregarle el saco verde también al campeón, que solo puede usarlo fuera del club durante el año que dura su reinado. Luego de eso debe devolverlo y solo lo puede utilizar dentro del club.
Los 52 jugadores que superaron el corte clasificatorio se encontraron con un día brutal en Augusta como no sucedía desde 2007. El sol radiante de la mañana le dio paso a nubes de frío, la temperatura nunca sube de los 11 grados y la sensación térmica era aún menor. A esto hubo que sumarle el viento con ráfagas que llegaron a los 30 km/h para completar un cocktail que le cayó muy mal a la mayoría de los jugadores. Solo 9 scores bajo el par de la cancha y un promedio que estuvo cerca de los 75 golpes, el más alto para una ronda del Masters desde 1983.
Siempre sucede que alguno de los que sale temprano, que son los que van peor en el torneo, se inspira y juega una gran ronda, pero cuando eso no sucede los líderes se dan cuenta que la cancha está jugando difícil.
Scottie Scheffler arrancó el día con 5 de ventaja y su comienzo no pudo ser mejor. Dos birdies en los primeros 3 hoyos le dieron mucha calma y esta le duró hasta el hoyo 12. Allí aparecieron los nervios, pegó un par de golpes que lo hicieron sufrir cuando la pelota estaba en el aire, pero por suerte para él todas terminaron en buena posición. Solo en el hoyo final pegó un golpe de salida muy malo, pero igual se las ingenio para perder solo un golpe y terminar el día con 3 de ventaja sobre el australiano Cameron Smith, que con 68 presentó la mejor tarjeta del día y fue el único en quebrar la barrera de los 70. Ellos dos compartirán la última salida el domingo en Augusta y no es casualidad. Han sido los dos mejores en el comienzo de este 2022, con Smith ganando el primer torneo del año en Hawaii, y el Players hace pocas semanas, mientras que Scheffler viene de ganar 3 torneos en los últimos dos meses.
Así como algunos jugaron bien hubo otros que padecieron durante el sábado. Uno de ellos fue Tiger Woods que curiosamente pegó mejor desde el tee que los primeros dos días, acertó más greens, pero tuvo en su putter a su peor enemigo: 4 greens de tres putts y uno de 4 putts no le permitieron a Tiger quedar a tiro para el domingo y los 78 golpes son su peor registro en 95 rondas en el Masters. Otro que la pasó mal fue el chileno Joaquin Niemann que cerró el viernes con un doble bogey en el 18 y que el sábado lo volvió a repetir para una ronda de 77 que lo deja sin posibilidades. El joven Niemann sigue acumulando experiencia en el Masters, un torneo en donde no es muy sencillo ganar sin haberlo jugado varias veces. De hecho, y si sacamos al ganador de la primera edición, solo un jugador ganó en su debut y los ganadores del Masters han jugado un promedio de 9 veces antes de ganarlo. El récord aquí lo tiene Sergio Garcia que recién en su decimonovena presentación pudo calzarse el saco verde.
Para hoy domingo se espera que el clima sea mejor, con algo de viento sí, pero con temperaturas que estarán alrededor de los 23 grados. Hay más jugadores con posibilidades para el domingo, pero todo dependerá de lo que haga el líder. Si este juega bien creo que será una pelea entre él y Smith, pero si el arranque de Scheffler no es bueno muchos mas podrán prenderse en la pelea y con mejores condiciones climáticas alguien viniendo de atrás puede firmar 65 y sentarse a esperar.
A disfrutar el domingo del Masters por la tele. El evento golfístico de mayor rating del año en USA y el que los fanáticos de todo el mundo esperan con mayor ansiedad. Si no son golfistas le sugiero que aunque sea se pierdan un rato de la tarde y prendan la televisión porque verán algo único. Si prestan atención verán algo sorprendente: no hay ni un solo cable y la razón de esto es que toda la cancha esta cableada por debajo de la tierra. Algo más en lo que Augusta fue pionera cuando en 1941 comenzaron con el cableado subterráneo para el sistema de scoring del torneo. Solo en Augusta.
SEGUIR LEYENDO