El resumen de la actuación de Tiger Woods
El jueves en Augusta se puso en marcha el primer gran campeonato del año. Los 50 milímetros que cayeron entre la tarde del miércoles y la madrugada del jueves hicieron que todo se demorara media hora, pero nada impidió que otra tradición del Masters suceda.
En 1981 una leyenda del golf como fue Byron Nelson, dos veces ganador del Masters, fue nombrado por el club como Starter Honorario. A él se le sumaron Gene Sarazen, ganador en 1935, y Sam Snead, quien se adjudicara el torneo en 3 ocasiones. Temprano el jueves ellos tres se daban cita en el tee del 1, pegaban un golpe de salida y el torneo quedaba inaugurado. El fallecimiento de estas tres leyendas dejó un espacio que estuvo vacío por varios años, hasta que en 2007 el club le ofreció a Arnold Palmer pegar el golpe inaugural. Tres años mas tarde se sumó Jack Nicklaus, máximo ganador del Masters con 6 títulos, y en 2012 el trío se completo con el sudafricano Gary Player, primer jugador internacional en ganar el torneo. El fallecimiento de Palmer dejó un lugar que recién este año se completó cuando el club invitó a Tom Watson, dos veces ganador, a ocuparlo.
Lloviznaba en Augusta en la mañana del jueves, pero las tres leyendas se hicieron presentes en el 1 como en tantas otras ocasiones. El Chariman del club hizo las presentaciones y fue Player (86) el primer en pegar, atrás suyo le tocó a Nicklaus (82) y cuando fue el turno, Watson (72), pidió permiso para decir unas palabras. Agradeció al club por la distinción y dijo sentirse muy honrado de poder compartir ese momento con dos leyendas del golf.
La edición 86 del Masters quedó inaugurada y todos esperaban que se hicieran las 11.04 para ver el retorno al golf competitivo de Tiger Woods. El 5 veces ganador del Masters no defraudó a nadie y terminó firmando una tarjeta de 71, 1 bajo par, con algunos golpes que hicieron recordar a un joven tigre. Al terminar le pidieron que describiera la ronda y dijo: “Muy difícil”, y agregó, “para llegar bien a mañana me tengo que meter en una bañadera de agua helada”. Se lo vio caminar con alguna dificultad y en su cara al terminar se veía el esfuerzo que había hecho para poder concluir la ronda. Veremos qué sucede, pero los fanáticos se fueron felices de Augusta por el solo hecho de volver a verlo jugar luego del tremendo accidente.
El año pasado el triunfo le correspondió al japonés Hideki Matsuyama y todos estaban pendientes del menú que eligiría para la tradicional cena de campeones. Ésta comenzó en 1952 por sugerencia de Ben Hogan, que pidió autorización para realizar una cena con los ex ganadores del Masters. Allí se formó lo que se llama el Masters Club, lugar adonde solo se puede pertenecer una vez que ganaste el Masters. La cena se realiza el martes por la noche y asisten solo los campeones y el chairman del club. Por años Byron Nelson fue el anfitrión y su reemplazo hace ya mas de 20 años fue Ben Crenshaw, quien dijo unas palabras y le dio la bienvenida a Matsuyama al club. Gary Player se levanto y pidió permiso para decir unas palabras, pero aclaró que lo haría en japonés. El discurso duró un minuto y Matsuyama agradeció profundamente el esfuerzo del sudafricano en haberlo hecho en su idioma. El menú fue sushi/sashimi de entrada, con un bife wagyu acompañado con champignones. Matsuyama viene de una lesión en la espalda y firmó el par 72.
La mañana quizá fue la mejor parte del día para jugar porque recién a partir del mediodía se levantó el viento y los que jugaron por la tarde tuvieron que pelear y mucho para salir airosos. La cancha estuvo en perfectas condiciones a pesar de la fuerte lluvia de los últimos días, esto gracias a un sistema que tiene Augusta y que es único en el mundo. Hace muchos años a alguien del club se le ocurrió poner un sistema de loza radiante debajo de los greens para poder manejar la temperatura del suelo. Eso se instaló primero en los hoyos 12 y 16, ambos con mucha sombra durante buena parte del día, y después se extendió al resto de los hoyos. Esto era solo en los greens, pero luego alguien pensó que esto también era bueno para toda la cancha, pero con una diferencia: había que inventar un sistema que pudiera sacar la humedad de los fairways para estar a salvo de las lluvias. Así nació el Sub-Air System que hoy hizo que la cancha se viera como si nunca hubiera llovido. No sé exactamente cómo funciona, pero uno camina por ciertos lugares del club y escucha unas especies de turbinas debajo del suelo y ve cómo de unas alcantarillas sale vapor. Así logran secar los fairways de Augusta.
Al final del día, el coreano Sunjae Im quedó al frente con una tarjeta de 67 golpes, con varios de los candidatos cerca de la punta. El australiano Cameron Smith, que finalizara segundo en 2020 y que viene de ganar el Players Championship, se fue con 68, mientras que un golpe mas atrás aparecen el nuevo N° 1 del mundo, Scottie Schefler, el inglés Danny Willet, campeón en 2016, Dustin Johnson, campeón de 2020 y el chileno Joaquín Niemann, que compartio la salida con Tiger.
Para lo que resta de la semana el pronóstico es muy bueno, pero con mucho viento, en especial el viernes, y con mucho frío el sábado. Cuando les digo frío, quiero decir una minima de 1 grado y una máxima de 14 para el sábado, con viento. No esperen scores bajos y no habrá que sorprenderse si el score ganador es de un solo dígito bajo par. Esto recién comienza y lo mejor esta por venir.
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