Luego de la disputa del partido pendiente de la jornada 4 entre Toluca y Rayados de Monterrey, en el Estadio Nemesio Diez, los jugadores visitantes se agruparon en torno al árbitro para reclamarle una decisión que derivó en el empate de última hora para los jugadores locales. No obstante, el juez Eduardo Galván trató de dispersar al grupo de inconformes al señalar a César Montes como el responsable del empate.
“Todos reclamenle a él”, pronunció el silbante mientras alegaba con los brazos y señalaba en dirección al número 3 de los regiomontanos. Al notar el señalamiento, el zaguero se acercó de manera amenazante para encarar al árbitro, pero el capitán Celso Ortiz impidió que tuviera algún tipo de contacto. Aunque el Cachorro quedó fuera del grupo, Maximiliano Meza continuó los reclamos, pero se tranquilizó cuando Galván amagó con amonestarlo.
Y es que, cuando parecía que los de Monterrey se quedarían con los tres puntos que los hubieran acercado a los primeros cuatro lugares de la clasificación, el juez sancionó una falta en el área de Esteban Andrada. Al minuto 95, los Diablos Rojos tuvieron la oportunidad de acercarse con un tiro libre. A pesar de los reclamos de los mexiquenses, el árbitro señaló la reanudación del encuentro.
Cuando el arquero de Rayados estuvo a punto de impactar el balón para continuar el partido, Galván lo interrumpió e indicó que la jugada estaba siendo revisada en el VAR. El silbante acudió a la pantalla y confirmó que, en su afán por impedir el avance de Haret Ortega, el Cachorro Montes jaló la camiseta de su oponente y lo derribó antes de ingresar al área chica.
El encargado de cobrar la falta fue el jugador encargado de abrir el marcador en favor de los Diablos Rojos de Toluca. Leonardo Fernández se perfiló desde los 11 pasos y, después de escuchar el pitazo del árbitro, ejecutó un fuerte remate con el empeine de la pierna izquierda al mismo lado de la portería. Esteban Andrada no logró adivinar la trayectoria y el balón cruzó la línea de gol.
El tanto fue el cuarto de la fiesta de goles que se vivió en la capital mexiquense. Apenas al minuto 10, Joel Campbell construyó una jugada individual con la que buscó ingresar al área de Toluca, pero al notar su posición de desventaja, Jorge Torres Nilo interrumpió su trayectoria con el cuerpo y provocó su caída. Maxi Meza fue el encargado de disparar y, con un sútil disparo de parte interna, pudo engañar a Luis García.
Casi 20 minutos después, una jugada a balón parado volvió a ser el factor diferenciador del encuentro. El argentino Leo Fernández dio gala de su habilidad en el cobro a balón parado y ejecutó un potente disparo. La trayectoria pasó por encima de la barrera, pero logró descender a tiempo y hacer una comba que tomó por sorpresa a Andrada. El recinto entero coreó la diana de la igualdad.
El cuadro de Víctor Manuel Vucetich no bajó los brazos y consiguió extender la ventaja a dos goles apenas cinco minutos después. En esta ocasión, Joel Campbell logró desmarcarse en un contragolpe y recibió un centro en el área chica que remató con un sólido testarazo. La cercanía inhabilitó a Luis García y los Rayados lograron volver a tomar las riendas del encuentro y el marcador.
Desde el minuto 35 los regiomontanos contaron con los tres puntos en el bolsillo. Los intentos de los Diablos Rojos no dieron resultado, aunque el arco de Esteban Andrada padeció durante algunos instantes. De esa forma, la súbita decisión del juez en el tiempo de compensación del segundo tiempo desencadenó el descontento de los pupilos del Rey Midas.
El marcador fue propicio para que los mexiquenses mantuvieran la ventaja en la tabla general. Mientras que, con 17 puntos, los de Ignacio Ambriz lograron sostenerse en el peldaño número 7, los regios lo hicieron en el octavo lugar con 16 unidades.
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