El Estadio Azteca fue testigo de un nuevo Clásico de Concacaf y lo hizo fiel a su costumbre. El ambiente festivo, lleno de alegría, con disfraces, sombreros y hasta mariachis se hizo presente para ver a la Selección Mexicana recibir a Estados Unidos en la eliminatoria mundialista.
Los seguidores aztecas llegaron con el ánimo de ver a su equipo romper la racha de tres derrotas consecutivas ante el acérrimo rival, pero lamentablemente para sus intenciones, se quedaron con las ganas, pues el cuadro de Gerardo Martino no pudo ante los norteamericanos y firmaron un insípido 0-0.
Fue el propio estratega del Tricolor quien protagonizó la previa y el post partido para un gran sector de seguidores, quienes reclamaron duramente su gestión y no se cansaron de gritar el famoso “Fuera Tata”, en especial una vez consumado el empate contra el conjunto de las Barras y las Estrellas.
A pesar del fervor con el que llegaron los seguidores mexicanos, en un partido que pronosticaba una auténtica fiesta en el Estadio Azteca, el rendimiento de México fastidió los ánimos y el público salió decepcionado con el equipo, pues no solo se hilaron cuatro partidos sin victoria contra Estados Unidos, sino que la experiencia en el Coloso de Santa Úrsula fue deplorable para miles.
El motivo fue el nuevo protocolo de la Federación Mexicana de Fútbol (FMF) para ingresar al Estadio Azteca, pues el famoso Fan ID provocó un caos en los torniquetes. La entrada al Coloso de Santa Úrsula por las taquillas de Calzada de Tlalpan culminó 50 minutos después de que empezó el esperado Clásico de Concacaf.
Cuando Manuel Mijares entonó el himno nacional, la parte alta del estadio lucía abandonada y no apareció el lleno que el boletaje agotado proyectaba. ¿La razón? El debutante sistema del Fan ID y su puesta en acción, pues ralentizó como nunca el ingreso al inmueble del Sur de la Ciudad de México.
Entre fallas en el sistema de recepción, en la lectura del famoso código QR –para el cuál se necesitó un registro previo por internet– la alta demanda que generó el partido, los chiflidos del público se hicieron presentes e incrementaron conforme avanzaba el juego.
Para el minuto 30 del partido, la resignación se apoderó de los aficionados, quienes pagaron más de mil pesos mexicanos para perderse prácticamente toda una mitad encuentro.
El Tricolor no conecta con la afición
En medio de los reclamos de la afición en redes a la Federación, el mal funcionamiento del equipo, los cuatro partidos sin ganar a Estados Unidos y los problemas de acceso en el Estadio Azteca, se confirmó que la afición mexicana no termina de conectar con su selección y eso se refleja en las declaraciones.
“Ya lárgate Tata”, “Regrésate a Argentina”, “¿Dónde está el Chicharito?”, “Esta selección no juega a nada”, “¿Dónde están los cambios?”, “Regresen al Piojo Herrera”, fueron algunas de las declaraciones recabadas por Infobae México tras el encuentro, en una muestra casi unánime de la desaprobación al nivel actual del Tricolor.
Las críticas llovieron desde distintas latitudes, pues a las gradas del Gigante de Santa Úrsula acudió un mar de seguidores procedentes de Estados Unidos, quienes aprovecharon el partido para visitar la Ciudad de México y recordar sus raíces. California, Houston, Nueva Jersey, Texas y Chicago fueron los principales puntos de partida de esta legión de mexicanos que se desplazó a la capital para ver a su selección.
Miguel Herrera, el candidato por defecto
El Piojo Herrera fue uno de los grandes protagonistas en los pensamientos de los aficionados mexicanos, pues figuraba como el primer nombre para un posible relevo al Tata a pesar de estar a escasos días de firmar el pase al Mundial. Por descarte, costumbre o porque “no hay de otra”, el nombre del entrenador de Tigres se colocó por el principal candidato por los seguidores esta noche.
Otros personajes como Antonio Mohamed, Ricardo Ferretti y hasta Javier Aguirre, que acaba de firmar con el Mallorca de España, aparecieron para buscar un relevo en el banquillo de México, pues la sensación fue unánime: no hay satisfacción ni ilusión en esta selección.
En un partido que pintaba para empezar a reconectar con la afición mexicana, la selección no cumplió, la experiencia en el acceso tuvo un punto muy crítico y el pase al Mundial no se finiquitó, todo alrededor de un nuevo partido sin victoria ante Estados Unidos, por lo que ya suman 13 años sin derrotar al odiado rival en el Estadio Azteca.
SEGUIR LEYENDO: