La temporada 2022 de la Fórmula 1 se encuentra próxima a comenzar con la puesta en marcha del Gran Premio de Baréin. Los preparativos se encuentran en su punto idóneo para que el Gran Circo inicie un nuevo año lleno de expectativas por varios elementos: el cambio de reglamento en los monoplazas, la pelea por el título que no tiene un claro favorito y por supuesto, la participación de Sergio Pérez con Red Bull Racing.
Por segundo año consecutivo, el piloto mexicano ocupará uno de los dos asientos disponibles en la escudería austríaca con la oportunidad más cercana que nunca de pelear directamente por el título en el Mundial de Pilotos. Y es que, en palabras del jalisciense es su objetivo ser campeón (todo en relación al papel que desarrolló en 2021 como el compañero escudero de Max Verstapppen).
Además, uno de los principales argumentos con los que Checo cuenta y que lo destacan de la mayoría en la parrilla es su experiencia en el circuito, pues cuenta con más de una década como integrante de la máxima categoría del automovilismo. Específicamente, con el transcurso de esta temporada el mexicano encara ya su decimosegunda de forma ininterrumpida.
En este aspectos, Pérez se encuentra en un selecto grupo de veteranos en el que comparte lugar con nombres como los de Fernando Alonso, Sebastian Vettel, Lewis Hamilton, Daniel Ricciardo o Valtteri Bottas. Otro de los puntos fuertes para este año es la configuración de Red Bull como equipo favorito, junto a Mercedes, al tener en sus filas al vigente piloto campeón y a haber luchado como hace tiempo no lo hacía en el campeonato de constructores.
“(Aspiro) a ser campeón, a sacar el máximo provecho en cada carrera y buscar ese campeonato”, dijo Checo en entrevista para Marca Claro, y añadió sobre su relación con Verstappen: “Tenemos una buena relación, hay un buen ambiente en el equipo y estamos muy ilusionados de esta nueva temporada”.
La cuestión es que el mexicano deberá realizar algunos cambios si desea cumplir con su meta. En un inicio su actitud de sacrificio tendrá que dejarla a un lado ya que si busca ganar carreras, naturalmente el egoísmo saldrá a relucir, principalmente en decisiones relacionadas a su coequipero. En segundo lugar, con obligación el nivel del piloto tendrá que subir. En la Fórmula 1, el rival número uno es tu compañero de equipo.
En la reciente temporada, en una comparación, la diferencia entre Pérez y Verstappen fue muy marcada. Mientras que el mexicano alcanzó en cinco ocasiones el podio, el neerlandés lo hizo en 18. En cuestión de puntos hubo una diferencia de 205.5 (396.5 contra 190). Las decisiones de equipo tampoco beneficiaron la cosecha de unidades para Checo, pero estas son tomadas de acuerdo a quién cuenta con mayor probabilidad de conseguir un mejor resultado.
Para Sergio las metas personales giran entorno a dos ejes. El primero referente a lograr renovar su vínculo contractual con Red Bull Racing (acaba este año), por lo que la primera mitad de las temporada será crucial su rendimiento a bordo del RB18. El segundo va en cuanto a la obtención de podios.
En 2021, el piloto obtuvo un lugar entre los primeros tres, cinco veces. Algo sin precedentes en su trayectoria. Su mejor marca había sido en la temporada 2012 cuando compitió como integrante de Sauber y obtuvo el reconocimiento en tres ocasiones (dos segundos lugares y un tercer lugar). Ahora, la probabilidad de superar ese récord es alto, pues en su segundo año y con una configuración del monoplaza a su medida, Pérez luce más adaptado a la escudería.
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