Con la apasionante victoria que logró el equipo de Los Ángeles Rams sobre los Cincinnati Bengals, la NFL cumplió con su Super Bowl número 56. Aunque el equipo campeón se convirtió en el segundo equipo consecutivo en coronarse al interior de su recinto deportivo oficial, existen récords que el partido más importante del año en el deporte más popular de Estados Unidos no pudo romper. Entre ellos se encuentra uno impuesto por el mexicano Saúl Canelo Álvarez en 2021, al interior del AT&T Stadium, de Arlington, Texas.
El conteo oficial de asistentes al SoFi Stadium, ubicado en Inglewood, Los Ángeles, California, registró a un total de 71 mil 048 personas. Aunque el aforo convocado por el espectáculo musical y deportivo fue de gran magnitud, la NFL se quedó a muy poco de igualar el récord de asistencia impuesto el 8 de mayo de 2021 en la pelea entre Saúl Canelo Álvarez y Billy Joe Saunders, mismo que se consolidó como el más concurrido en todos los Estados Unidos desde la reapertura por la pandemia del virus SARS-CoV-2.
En la reyerta donde el mexicano despojó al pugilista inglés del cinturón avalado por la Organización Mundial de Boxeo (OMB) se dieron cita 73 mil 126 fanáticos en las gradas y parte de la cancha del nuevo hogar de los Dallas Cowboys de la NFL. Al superar el aforo del Derby de Kentucky que, con 51 mil 838 espectadores, se convirtió en el evento con más afluencia después de la cancelación de eventos por la pandemia, también sobrepasó el nivel de convocatoria de otro mítico boxeador.
El 15 de septiembre de 1978, Muhammad Ali buscó la revancha en contra de Leon Spinks tras la derrota sufrida en febrero. La expectativa fue tal que 63 mil 352 personas se dieron cita en el Superdome de Nueva Orleans. El evento fue catalogado como el más visto en vivo en la historia del boxeo estadounidense.
Quince años después, la pelea entre Julio César Chávez y Pernell Whitaker en el Alamodome de San Antonio, Texas, estuvo a punto de imponer una nueva cifra máxima. Los conteos oficiales registraron a 63 mil personas en las gradas del recinto, aunque versiones extraoficiales aseguraron que la asistencia total pudo haber superado los 70 mil aficionados.
Al garantizar la venta total de las localidades en cualquier recinto donde planee alguna pelea, Canelo Álvarez ha convertido al país estadounidense en su hogar. Sin embargo, se encuentra lejos de superar el aforo máximo histórico reportado en un partido de la NFL. Dicho acontecimiento tuvo lugar en septiembre de 2009, cuando 105 mil 127 espectadores acudieron al encuentro inaugural del nuevo estadio entre los Dallas Cowboys y los New York Giants.
La cifra impuesta por el mejor libra por libra del mundo no se podrá superar en las próximas dos ediciones del Súper Bowl, es decir, tanto la LVII como la LVIII. En el año 2023, la gran final tendrá lugar en el State Farm Stadium de Phoenix, Arizona, cuya capacidad es de 63 mil 400 lugares. Mientras tanto, el Allegiant Stadium, de Las Vegas, Nevada, con aforo para 65 mil espectadores, será la sede designada para el año 2024.
Por su parte, al contar con el récord histórico de asistencia en el boxeo estadounidense, con la agenda que podría entablar en 2022 Canelo Álvarez cuenta con la posibilidad de imponer una nueva cifra máxima. Sus rivales aún no están definidos, pero entre las opciones se encuentran duelos prometedores en contra de Dmitry Bivol, por el título de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) en semipesado, así como la trilogía frente a Gennady Golovkin por la supremacía de las 168 libras.
Otro de los candidatos a enfrentarlo es Jermall Charlo, quien está dispuesto a abandonar su corona en las 160 libras para buscar el título indiscutido de los supermedianos. De igual forma, el Canelo Team tampoco ha descartado la posibilidad de encarar a Ilunga Makabu en peso crucero para obtener la corona mundial en cinco divisiones distintas.
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