Desde su llegada a Australia en la noche del miércoles, Novak Djokovic está transitando unos días de suma intensidad después de que la Fuerza Fronteriza le rechazara el visado para ingresar al país a disputar el primer Grand Slam del año.
Éste lunes, y después de haber permanecido en un hotel de refugiados, el serbio se presentó ante el juez Anthony Kelly del Tribunal del Circuito de Melbourne, quien ordenó al Gobierno australiano su liberación, además de la devolución de sus documentos personales y el pago de los costos legales.
Fue después de esta decisión que el actual número uno del mundo del tenis mundial se pronunció públicamente a través de su cuenta oficial de Twitter.
“Estoy complacido y agradecido de que el juez revocara la cancelación de mi visa. A pesar de todo lo que ha pasado, me quiero quedar y tratar de competir en el Abierto de Australia. Sigo concentrado en eso. Volé aquí para jugar en uno de los eventos más importantes que tenemos frente a los increíbles fanáticos”, escribió el serbio junto a una imagen suya y de su equipo en en el Melbourne Park.
“Por ahora no puedo decir más, pero GRACIAS a todos por estar conmigo a través de todo esto y animarme a mantenerme fuerte”, sentenció.
Antes de expresarse en sus redes sociales fue la familia la que decidió salir a hablar en una conferencia de prensa convocada por su padre Srdjan Djokovic en Belgado (Serbia).
“Novak es libre, está en Australia para ganar otro Open. Tiene una exención médica. Es el mejor jugador de todos los tiempos y está siguiendo sus principios y sus ideas”, aseguró Djordje, el hermano del número uno del mundo.
Quien también estuvo presente en la conferencia fue Dijana Djokovic, madre del tenista, quien sostuvo: “Celebramos la victoria de nuestro hijo, quien no ha hecho nada malo, no ha violado ninguna ley y ha sido acosado. Él ha peleado contra el sistema porque sabía que tenía una visa válida”.
Djokovic llegó el miércoles pasado a Melbourne con una exención médica con la intención de jugar el Abierto de Australia este mes, pero los agentes de Inmigración le denegaron el visado y lo pusieron bajo custodia en un hotel de refugiados mientras sus abogados presentaban un recurso ante los tribunales.
El tenista alegó que tenía una exención al haberse contagiado de la covid-19 el pasado diciembre y que había recibido luz verde para viajar al país por parte de la Federación de Tenis y del Gobierno de Victoria. Posteriormente, el tribunal de Melbourne terminó dándole la razón al tenista, que ha recibido el apoyo de decenas de personas que se han manifestado en Melbourne y de las autoridades de Serbia, su país de origen.
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