Se recuperó de dos caídas y ganó con un impactante KO, pero la actitud del árbitro indignó al mundo del boxeo

Pese al mal comienzo, Luis “King Kong” Ortiz logró imponerse ante Charles Martin, ex campeón mundial de los peso pesado. Sin embargo, la labor del juez empañó la velada que se llevó a cabo en el Hard Rock Live de Hollywood, Florida. La falta de reacción del árbitro pudo haber ocasionado una tragedia y esto indignó a los amantes del boxeo.

A sus 42 años y tras 14 meses de inactividad, el cubano Ortiz (33-2, 28 KOs) superó dos caídas iniciales y terminó logrando un impactante nocaut en el sexto round. “King Kong” lo logró con un volado de izquierda que aturdió al norteamericano Martin (28-3-1, 25 KOs) y ex campeón mundial de la FIB (triunfo ante Vyacheslav Glazkov en 2016). La descarga de golpes de Luis dejó a Charles muy sentido y con su guante enredado entre las cuerdas al caer.

El árbitro hizo su ingreso tarde y dio por terminada la pelea en favor del cubano, que antes había hecho caer a su rival con un recto al mentón. Hasta el final decretado por el árbitro en el 1:37 del sexto asalto, Martin se encontraba adelante en las tarjetas por 48-45, 48-45 y 47-46 y mostró su enfado por la detención.

“Definitivamente estaba muy concentrado para esta pelea; nunca me preocupé. Zurdo contra zurdo es una pelea muy difícil. Al final, la inteligencia ganó la pelea”, expresó Ortiz, octavo peso pesado, en diálogo con ESPN.

“Yo dije que esta pelea sería de mucho entusiasmo y que iba a haber guerra, en el boxeo un golpe termina la pelea pero él no pudo terminar conmigo. Lo respeto mucho como dije. Yo me mantuve como soy, no me desenfoco de mi trabajo. Ustedes (los periodistas) son los que dan la posibilidad. Tengo tantos (rivales de peso completo) en mi línea que no sé a quien escogería si pudiera elegir algún rival. Quiero a todos los campeones de los pesos completos”, agregó sobre su futuro inmediato.

No fue una pelea sencilla para “King Kong”, ya que en el primer round Charles Martin conectó un buen golpe detrás de la oreja que lo hizo caer y luego repitió en el cuarto asalto con un jab, que lo sentó en el piso.

Gracias a este impactante KO, Ortiz, aún con 42 años, se ilusiona con una pelea de mayor valía en la división de peso pesado. Vale recordar que “King Kong” es uno de los mejores peso pesado del momento y solo cuenta con solo dos derrotas, ambas por la vía rápida, contra el temible Deontay Wilder (la última, en noviembre de 2019).

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