El fútbol mexicano tiene una de las anécdotas más insólitas en la historia del deporte nacional, pues el 28 de julio de 2015, el entrenador de la Selección Mexicana de Fútbol, Miguel Herrera, no soportó las críticas ni los supuestos insultos de Christian Martinoli, por lo que después de ganar la Copa Oro golpeó al comentarista deportivo tras una acalorada discusión.
El hecho derivó en su salida del cuadro nacional y puso fin a 21 meses de trabajo al frente del Tricolor, en los que disputó un repechaje para el Mundial de Brasil 2014, una Copa América con cuadro alterno y una Copa Oro.
A pesar de los resultados positivos, ya que pudo clasificar a la Copa del Mundo, quedarse a minutos de los cuartos de final y obtener el título de la región, las críticas por el estilo de juego no cesaron y durante el polémico torneo de Concacaf, la presión sucumbió al entrenador mexicano y dejó de ganar una importante suma de dinero por su contrato con la selección y los patrocinadores que tenía firmados.
Durante su paso por la selección mexicana, el oriundo de Cuautepec ganó alrededor de 132 millones de pesos mexicanos. Más de USD 6 millones actuales, en conceptos salariales como director técnico y con otro gran incentivo por parte de patrocinadores durante la época, entre los que resaltan Movistar, Ciel y hasta el Gobierno de Chiapas.
La información recopilada en la base de datos de Mxsports y de Mario Uvence Rojas, titular de la Secretaría de Turismo de Chiapas en aquel entonces, reveló que hasta antes de su cese por violar el código de ética de la FMF, Miguel Herrera recibió 15 millones de pesos (USD 754 mil) únicamente por participar en la campaña de Chiapasionate, además de otros 3 millones de pesos (USD 150,000) por los tweets promocionales del Partido Verde en plena época electoral, en un acto que además estaba en contra de la ley.
Además, de acuerdo con un informe presentado por la revista Forbes, el Piojo Herrera tenía un contrato con la selección mexicana de USD 2 millones 700 mil al año, que por el tipo de cambio en ese momento rondaba los 40 millones de pesos mexicanos.
Al momento de perder los papeles y agredir a un comentarista deportivo, el artículo que rompió en el Código de Ética de la Federación Mexicana de Fútbol fue el siguiente:
“Los integrantes de la FMF, afiliados y terceros involucrados, están obligados a dirigirse con respeto hacia los medios de comunicación, proporcionando siempre información clara y veraz en apego a las normas vigentes”.
Debido a las cláusulas del contrato que había firmado el Piojo, que incluían una revisión cada que finalizara un torneo, Miguel no pudo cobrar un solo peso de indemnización, ya que la FMF contaba con los argumentos suficientes para no mantener el vínculo contractual sin necesidad de pagar una cláusula de rescisión, de acuerdo con Forbes.
Esto significó dejar de cobrar el salario acordado por un año y romper con los patrocinadores que tenía firmados como Movistar y Segundamano, entre otros, por lo que Miguel Herrera tuvo que empezar de cero sus negociaciones monetarias.
Posterior a su paso con México, Miguel Herrera tuvo una breve etapa con los Xolos de Tijuana, hasta que en 2017 llegó de nueva cuenta al Club América, donde sus finanzas subsanaron notablemente dos años después.
En Coapa, Miguel Herrera firmó un contrato por una cifra similar a la que percibía en la Selección Mexicana, ya que de acuerdo con información recopilada por el portal Goal, el estratega recibía alrededor de USD 2,000,000 al año, cerca de 40 millones de pesos actuales, aunque sin la exposición mediática que tuvo al mando del Tricolor.
Ahora con los Tigres de la UANL, el Piojo percibirá alrededor de USD 3 millones al año, de acuerdo con el Economista, por lo que se consolida como uno de los estrategas con mejor salario de México.
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