Contra todo pronóstico, el entrenador de Saúl Álvarez, Eddy Reynoso, solicitó el pasado martes 16 de noviembre un permiso ante el Consejo Mundial de Boxeo (CMB) para que su pupilo ascendiera nuevamente de división y así poder retar a Ilunga Makabu por el cinturón del peso crucero.
Este reto significará que el pugilista tapatío deberá subir alrededor de 14 kilos para poder estar en la división del congoleño, por lo que tras la confirmación, atravesará el reto físico más complicado de su carrera hasta el momento.
Con el objetivo de convertirse en el primer mexicano que se proclame campeón en cinco categorías distintas, Canelo se medirá con un experimentado campeón oriundo de la República Democrática del Congo, Ilunga Makabu, quien ya se expresó al respecto y dejó un fuerte mensaje dirigido a Saúl y su salud.
En palabras ofrecidas para Fight Hub TV, el campeón congoleño comenzó por decir que sus motivaciones personales lo convertirán en un rival muy fuerte para el mexicano, por lo que se mostró confiado de sus capacidades y hasta se atrevió a llamarle loco a Canelo por retarlo.
“Podría decir que Canelo está loco porque está retando a un hombre muy peligroso como yo. Se puso en el camino de alguien que lo tiene en la mira, que persigue un sueño muy grande y lo estaré esperando”, declaró el pasado jueves.
Pero la declaración que podría empezar a encender esta naciente rivalidad fue cuando se refirió a sus intenciones sobre el cuadrilátero, pues aseguró que derrotará a Saúl mediante la vía del cloroformo.
“Voy a noquear al Canelo Álvarez”
“Haré que la gente ame el boxeo al verme y le daré a Canelo lo que busca, una buena pelea, algo que la gente recuerde”, afirmó el pugilista de 34 años, justo antes de revelar cuáles serán algunas de sus estrategias para derrotarlo a mediados del 2022.
“Todos saben quién es Álvarez y cómo pelea, pero saben muy poco de mí, soy capaz de boxear, de defender, de ser técnico, de pegar fuerte, veamos si Canelo resiste”, sentenció el congoleño, quien ostenta un récord de 28 victorias y solamente dos derrotas. La primera de ellas ocurrió en su debut profesional en 2008; mientras que la última se dio en mayo de 2016.
Debido a que el tapatío se meterá en terreno desconocido por tener que aumentar de peso de manera radical, los pronósticos de varios especialistas son reservados, ya que también tendrá que lidiar con la altura de Mukaba, quien alcanza los 188 centímetros de estatura.
Las amenazas de Makabu se sostienen en un común denominador de sus resultados, ya que de las 28 victorias que posee, 25 de ellas las propinó antes de los 12 rounds, por lo que es un especialista en terminar los combates por nocaut.
A pesar del buen rendimiento en su palmarés, dos de sus últimas tres peleas las tuvo que ganar por decisión. Una de ellas, ante el ruso Alexei Papin en agosto de 2019, incluso se la llevó por decisión dividida; sin embargo, le sirvió para retener por primera vez su cinturón crucero del CMB.
El principal conflicto que padece el historial de Mukaba es que sus dos derrotas llegaron por la vía del nocaut y en una etapa muy temprana del combate. Primero ante el sudafricano Khayeni Hlungwane, cayó al segundo 30 del primer asalto en 2008; mientras que la segunda derrota llegó en el tercer round ante el británico Tony Bellew, en mayo de 2016.
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