Después de varios días conviviendo con las miradas sobre su rodilla izquierda –con tratamiento exprés en Madrid incluido–, Lionel Messi volvió a tener un poco de acción en la victoria 1-0 de la selección argentina sobre Uruguay por la 13ª fecha de las Eliminatorias. El capitán acordó jugar unos pocos minutos para resguardar su físico, teniendo en cuenta que llegó a este duelo con casi dos semanas de inactividad.
Leo recién se paró cerca de los 20 minutos para hacer un calentamiento y cuando el reloj marcaba la media hora de acción del complemento ya estaba dentro del campo de juego en lugar de Giovani Lo Celso. Nicolás Otamendi rápidamente se acercó y le cedió la cinta de capitán que había sido propiedad de Ángel Di María en el comienzo del juego, pero que había caído en el marcador central cuando Fideo fue reemplazado por Ángel Correa.
El capitán habitual se mostró cauto en sus movimientos, se paró cerca del círculo central para intentar retener la pelota y no tuvo grandes irrupciones en los casi 20 minutos que finalmente duró su presencia.
Con su estado físico en el centro de los flashes, la única chance que tuvo de acercarse al área rival llegó cerca de los 47 minutos tras una buena jugada colectiva. El Papu Gómez controló por izquierda, le dio espacio a Marcos Acuña para que juegue a la espalda del mediocampo celeste y lanzó para el ex Ferro. El Huevo hizo una maniobra personal magistral, dejo a dos rivales en el camino y sacó ese pase a la medialuna del área para Messi. La Pulga enganchó muy abajo la pelota y la tiró demasiado lejos del arco que defendió Fernando Muslera.
El Dibu Martínez elogió la actitud del crack argentino de querer estar a pesar de sus complicaciones en la rodilla y tras la victoria señaló: “Él siempre quiere estar, es un animal entrenando. Pero como no estaba al 100% decidió no forzar y me parece bien”. Previamente, Roberto Fabián Ayala –ayudante de campo de Scaloni– se había sincerado sobre la decisión de colocar a Leo en el banco de suplentes. “Lo habló con el entrenador, lo charlaron y quedó así. Hay cosas por delante que se juega a nivel personal y también en la Selección”, detalló el integrante del cuerpo técnico.
“Decidimos que Leo (Messi) no juegue porque venía de una inactividad y porque el partido iba a ser un tipo de partido como se dio. Entró en el segundo tiempo para que vaya agarrando ritmo y vaya pensando en el partido de Brasil”, reconoció el propio Scaloni en conferencia de prensa.
El análisis ahora se trasladará al próximo martes cuando la selección argentina reciba en San Juan a Brasil por una nueva jornada de Eliminatorias. Se espera que en caso de estar bien físicamente, Messi vuelva a ser titular. El futbolista rosarino de 34 años había tenido minutos de juego por última vez el 29 de octubre pasado cuando duró solo 45 minutos en cancha del duelo entre PSG y Lille por la Ligue 1.
Más allá de todo lo emparentado al juego, por las redes sociales se conoció que Leo se llevó un regalo para su enorme museo de camisetas y trofeos: las autoridades de Peñarol le entregaron una casaca con el número 10 y su nombre.
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