Saúl Canelo Álvarez enfrentó a Caleb Plant en una pelea que unificó los campeonatos mundiales de peso supermediano. Este fue uno de los eventos deportivos más esperados del año, y no pudo pasar desapercibido el más mínimo detalle, por ello, la entrada al ring del Canelo fue un espectáculo a parte, caminando con la banda de Maná, al ritmo de la canción de “El Rey”.
El encuentro tuvo lugar en el MGM Grand Garden Arena en Paradise, Nevada en Estados Unidos. El público estaba coreando el apodo del mexicano, la ovación era inmensa, todos esperaban el ingreso del Canelo cuando de repente, las luces se apagaron. Se iluminó el pasillo de entrada para los peleadores y a lo lejos se distinguió a Fernando Olvera, el vocalista de la banda de rock mexicana, Maná.
“Yo sé bien que estoy afuera, pero el día que me muera, sé que tendrán que llorar”, se escuchó al ritmo de la banda. Las luces del coliseo volvieron y el público coreó de inmediato: “Llorar y llorar”, se escuchaba. “Dirás que no me quisiste, pero vas a estar muy triste, y así te me vas a quedar” cantó Olvera mientras el Canelo entraba detrás del vocalista.
Un poncho dorado de la marca Dolce & Gabbana cubrió el cuerpo del campeón mexicano. Los adornos plateados resaltaban el contorno de la prenda, el atuendo de campeonato lucía la leyenda de México, por debajo de la marca, dejando ver a cualquiera el origen del boxeador. Sus guantes blancos hacían un combinado perfecto para completar su vestimenta dorada. Por supuesto, su short era de la misma marca y de una tonalidad de oro.
Cuando El Canelo y la banda de Maná estuvieron a la vista de todos, el MGM rugió entre aquellos que cantaban la canción, los otros que gritaban y el aplauso de todos los presentes. El vocalista y el boxeador caminaron codo a codo rumbo al cuadrilátero. Saúl Álvarez aprovechó el camino para tirar unos cuantos golpes al aire, una pequeña práctica de sombra de boxeo previó a su pelea.
La canción que era entonada por Maná se acopló perfectamente al personaje, pues Canelo puede ser identificado como el monarca del boxeo actual. “No tengo trono ni reina, ni nadie quien me comprenda, pero sigo siendo el rey”, se escuchó en las bocinas del coliseo, aunado al cántico de los presentes y de las manos en alto por parte de Saúl Álvarez.
Esta pelea implica muchos títulos en juego. Por parte del Canelo, expondrá los campeonatos de la Confederación Mundial de Boxeo (CMB), Asociación Mundial de Boxeo (AMB) y el de la Organización Mundial de Boxeo (OMB). Mientras que el estadounidense pondrá en juego la corona de la Federación Internacional de Boxeo (FIB) de la misma división. El ganador de este combate titular unificará los cuatro campeonatos de peso supermedio, convirtiéndolo en el mejor peleador de su división a nivel mundial.
Antes de la reyerta contra Saúl Álvarez, Caleb Plant preserva un récord profesional de 21-0: ganó 12 enfrentamientos por nocaut y nueve por decisión. Por su parte, Álvarez llegará al compromiso con un margen más amplío en la estadística, ya que registra 56 triunfos, una derrota y dos empates. 38 del total de sus alegrías surgieron por la vía del KO. El resultado de esta pelea puede ser un punto de inflexión para la carrera de ambos boxeadores, por un lado puede terminar el invicto de Caleb, por otro lado, el mexicano puede hacer historia al ser el campeón unificado.
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