Un hecho aterrador vivió Dalton Roach, un joven jugador del equipo filial de los Springfield Cardinals, cuando un oso lo atacó en medio de una jornada de caza. El beisbolista, que se encontraba solo en medio de un bosque en Estados Unidos pudo grabar parte de la escena y contó su experiencia a sus seguidores.
El lanzador del equipo juvenil de Missouri había aprovechado sus días libres para volver a su tierra natal Trempealeau, en el estado de Wisconsin, y utilizó una de sus tardes para cazar ciervos, actividad que suele estar permitida en determinados momentos del año. El joven que se encontraba solo se había trepado un árbol para desde allí para tener buena vista y poder acertarle a algún animal, cuando vio a un oso negro merodear por la zona.
“Era la primera vez que veía uno, entonces decidí filmarlo”, contó Roach en diálogo con una cadena de noticias local en donde repasó el episodio. Lo que parecía ser un encuentro pacífico se volvió tenso de repente: “Guardé el celular en el bolsillo de mi campera y ¡pum! el oso trepó el árbol hasta quedar justo detrás mío”.
Asustado por la situación, en un primer momento el beisbolista optó por quedarse quieto: “Mi reacción fue la de mantener la calma, pero de repente, puso una de sus patas en mi cintura y entonces la situación se volvió complicada. Lo siguiente que sé es que puedo escucharlo justo detrás de mí y sentirlo respirar en mi hombro”.
Hasta que en un momento el oso le mordió la espalda y eso hizo que el jugador de los Cardinals tome otra postura: “No es divertido darse vuelta y ver al animal que obviamente es más grande que uno, pero dije ‘obviamente tengo que actuar como si yo fuese más grande que él porque esta es mi única oportunidad’”. Fue así que elevó sus brazos para ampliar el volumen de su cuerpo e intento hacer una especie de rugidos y gritos para ahuyentar al oso.
Su estrategia funcionó a la perfección, porque lentamente el animal descendió del árbol y siguió su camino. Por su parte, Roach volvió de inmediato a su hogar para reunirse con su esposa: “La miré casi riéndome y le dije, un oso me mordió”. Más tarde fue a un hospital cercano en donde le limpiaron la herida y le dieron unas vacunas contra la rabia y otras enfermedades para evitar problemas futuros.
“Soy muy afortunado de que todo esto terminara así y ahora tengo una gran historia que contar”, analizó aliviado el lanzador que fue elegido por los Astros de Houston en el Draft de 2018 y que ahora forma parte del equipo filial de Springfield Cardinals.
Por su parte, expertos en la fauna de esa zona de Wisconsin explicaron al noticiero del canal 12 local que si bien la actitud del oso fue sorprendente, no es inusual, ya que evidentemente era simplemente curiosidad lo que lo llevó a trepar el árbol para alcanzar a Roach, a quien pudo haberlo lastimado realmente si así lo hubiese pretendido.
SEGUIR LEYENDO: