Paco Villa sigue acumulando reflectores por sus revelaciones. Ahora contó cuál ha sido la única vez que ha recibido reclamos de altos cargos deportivos por sus opiniones. La crítica llegó por parte de un ex compañero suyo, Ricardo Peláez, que a finales de 2011 asumió la presidencia deportiva del América.
En entrevista con el Escorpión Dorado, el narrador recordó el intercambio que tuvo con el ahora directivo de Chivas. “Una vez recibí una llamada de gente del América, fue de Ricardo Peláez recién tomando él la presidencia deportiva. Y fue para reclamarme que por qué había dicho que Paúl Nicolás Aguilar merecía una tarjeta roja. Se armó la discusión, él entendió que no me tenía que hablar nunca más en ese sentido. Me parece que el asunto se arregló”.
Villa apuntó que tiene una amistad con Peláez y que, salvo esa ocasión, nunca ha recibido reprimendas por sus puntos de vista. “Fue directamente de alguien que trabajó con nosotros durante siete u ocho años a quien considero mi amigo”.
“Él (Peláez) tomo de mala manera su nueva profesión como directivo del América, pero lo entendió rapidito y el asunto se arregló”, recordó.
Ricardo Peláez fue presidente deportivo del América durante más de seis años. Su llegada fue un punto de inflexión en los malos torneos que había tenido el club azulcrema previamente. Incluso llegaron a existir problemas en la tabla porcentual. Todo el camino se recompuso a partir de la selección de Peláez Linares como mandamás de las riendas deportivas del club.
Primero, eligió a Miguel Herrera como director técnico, una apuesta arriesgada pues hasta ese momento no había ganado ningún título en su carrera. La siguiente determinación de Peláez fue dar el visto bueno para una serie de refuerzos que significaron un salto de calidad en comparación con los jugadores que conformaban la plantilla. Aunque, desde luego, hubo elementos ya asentados que contribuyeron al renacer del club, como Christian Chucho Benítez y Paul Aguilar.
El primer gran éxito de Peláez como director deportivo llegó en el Clausura 2013. El Ave de las Tempestades rompió una sequía de ocho años sin título liguero. Lo hizo a costa de Cruz Azul en una final en la que tuvo que venir de atrás para empatar el marcador global y luego hacerse con el título en la tanda de penales. Aquella conquista ratificó la confianza de Emilio Azcárraga Jean en el proyecto confeccionado por Ricardo Peláez.
Un año más tarde, ya sin el Piojo Herrera como entrenador, Las Águilas sumaron un título más a sus vitrinas. Se impusieron a Tigres por marcador de 3-1 global y bordaron su doceava estrella. Sin embargo, las tensiones entre el director técnico, Antonio Turco Mohamed, y Ricardo Peláez eran imposibles de solucionar. Fue así que, pese a ganar el campeonato, la presidencia deportiva optó por forzar a la renuncia de Mohamed. En su lugar llegó el uruguayo Gustavo Matosas, que había sido bicampeón con el León.
No fue el único conflicto que vivió Peláez como directivo. A nivel interno, tuvo que lidiar de forma constantes problemas relacionados con la disciplina dentro del juego: al América le expulsaban muchos jugadores y, sobre todo, a su jugador insignia, Rubens Sambueza. Pero eso era solo una parte del pastel. El presidente deportivo tenía que lidiar además con las recias críticas de ex jugadores del club que le cuestionaban su trato hacia las leyendas.
Desde Cuauhtémoc Blanco hasta Carlos Reinoso, pasando por Antonio Carlos Santos y Daniel Ruso Brailovsky, la mayoría de íconos azulcremas jamás sintieron a Peláez como alguien de casa. Lo hicieron saber en todo momento. El homenaje que todos ellos recibieron en el centenario del club no bastó para amainar los cuestionamientos.
Además de la dos ligas, el América alzó dos Concachampions durante la gestión de Peláez. La primera con Matosas y la segunda con Ignacio Ambriz. El ciclo concluyó en el Apertura 2017.
SEGUIR LEYENDO: