Christian Chaco Giménez quiere hacerse de un nombre en la dirección técnica. El Atenas SAD del futbol uruguayo le ha brindado esa posibilidad. El club que milita en la segunda categoría del balompié charrúa ha hecho oficial la incorporación del entrenador mexicano. Giménez tomará el lugar que dejó vacante Diego Forlán el pasado 18 de septiembre.
Atenas San Carlos es propiedad de Grupo Pachuca, que en los últimos años ha mostrado pleno interés en el futbol sudamericano. Han invertido dinero en Chile con Everton de Viña del Mar y en Argentina con Talleres de Córdoba. El presidente del club charrúa es Juan Pablo Fassi, hijo de Andrés Fassi, cara reconocible del Pachuca durante la década pasada y que actualmente funge como presidente de Talleres.
Chaco tendrá su segunda experiencia en el banquillo luego de su paso por Cancún FC. En el año que estuvo al frente de dicho club, en la Liga de Expansión, consiguió calificar al repechaje en los dos torneos que dirigió; sin embargo, cayó en ambas oportunidades y no pudo disputar la Liguilla. En Atenas San Carlos, el estratega podría dirigir al mexicano Aldo Magaña.
Christian Giménez llegó a México en el año 2004, procedente de Unión de Santa Fe. Su primer equipo en suelo azteca fueron los Tiburones Rojos del Veracruz. En el puerto firmó una gran participación con el conjunto escualo; junto a Cuauhtémoc Blanco y Kléber Boas conformó un ataque de miedo que sigue siendo recordado hasta el día de hoy. El equipo porteño consiguió un superliderato, y aunque no pudo hacerse con el torneo de liga, su estilo de juego le mereció los aplausos de todo el balompié nacional.
Después de aquella carta de presentación, el Chaco pegó el salto al América. Las Águilas tuvieron la intención de replicar lo que aquel Veracruz había mostrado, pues repatriaron a Cuauhtémoc y se hicieron de los servicios de Kléber. Todo parecía hecho a la medida.
Sin embargo, el panorama cambió radicalmente para Giménez durante el año que visitó los colores de Coapa. No pudo mostrar el mismo nivel que había sorprendido en Veracruz y se resignó a cambiar de equipo. Eso sí, consiguió el campeonato de la Concacaf frente a Toluca.
Pero los mejores momentos de su carrera apenas estaban por llegar. El Pachuca depositó su confianza en él y lo rescató de lo que era hasta entonces el momento más duro en su andar futbolístico. Fue así que Giménez y los Tuzos firmaron una época de ensueño: consiguieron un título de Liga MX, dos Concachampions y la Copa Sudamericana 2006, en la que vencieron, contra todo pronóstico, al Colo Colo de Chile.
Para ese momento, Christian ya era una figura indiscutida del futbol mexicano. Pero le faltaba dar un paso más: la consagración en uno de los llamados grandes. Cruz Azul fijó sus ojos en él y Chaco correspondió al interés. La Máquina se encomendó así a uno de los jugadores con mayor palmarés del futbol azteca. No tardó mucho tiempo en afianzarse como referente y luego como ídolo. Sin embargo, el objetivo no pudo llegar.
Los cementeros ganaron una Concachampions y una Copa MX, pero la Liga se les escapó de manera frustrante contra el América, en una de las finales más recordadas de la última época. Chaco se mantuvo en La Noria hasta 2017. Experimentó una larga decadencia colectiva, pues el club pasó tres años (2014-2017) sin poder entrar a una Liguilla. Después, en 2018, dio por finalizado su ciclo en Cruz Azul y fichó por Pachuca para poner fin a su carrera.
Tras un breve periodo como comentarista de Fox Sports, el Chaco decidió regresar al mundo del futbol como entrenador. Ahora, tendrá una prueba que podría catapultarle a sitios estelares.
SEGUIR LEYENDO: