El equilibrio de un vestuario plagado de estrellas, egos y rendimientos altos será uno de los grandes desafíos que deberá afrontar Mauricio Pochettino en esta estadía en el banco de suplentes del París Saint Germain. Las tensiones lógicas de cualquier plantel se acumulan en este Dream Team con otras aristas acordes a la talla de las figuras que componen las estructuras parisinas como la constante lupa mediática sobre cada paso y las presiones externas por distintos intereses que exceden a los objetivos del club.
Después de las controversias que dieron vuelta al mundo por el cambio de Lionel Messi a más de 15 minutos del final de un partido que iba empatado con Lyon, uno de los temas que mayor temperatura genera es la batalla por el arco con dos futbolistas de primer nivel como candidatos: Keylor Navas y Gianluigi Donnarumma.
Pochettino salió indemne de la balacera que significaron las críticas mundiales por la salida anticipada de Messi después de confirmarse la lesión en la rodilla izquierda que ya lo marginó de dos partidos y lo pone en riesgo de cara al trascendental cruce contra Manchester City por Champions League. Pero ahora deberá mostrar la flexibilidad de su cintura para evitar que los chispazos externos que genera la batalla por los tres palos alcancen al vestuario del PSG.
Desde Italia insisten con que la llama está a poco de prenderse y hasta se apoyaron en teorías conspirativas para justificar la supuesta prioridad que tiene Navas por encima de Donnarumma hasta el momento. El prestigioso Corriere della sera publicó que existe un “pacto sudamericano” tácito que le sirve al costarricense como respaldo para batallar por la titularidad de los tres palos.
El periodista Stefano Montefiori destacó en su crónica que “los sudamericanos están muy unidos” con el foco puesto en Ángel Di María, Leandro Paredes Marquinhos y Neymar, pero también en el recién llegado Messi. Este bloque de amistad, advierte, es un cimiento importante para un Keylor que lleva dos temporadas en alto nivel en el PSG y que tras el desembarco de Donnarumma debió ceder una importante cantidad de minutos en la competencia.
El prestigioso diario italiano advierte que el clan sudamericano “no tiene nada contra los demás y mucho menos contra Donnarumma”, pero de todos modos titularon con que hay un “pacto sudamericano” que en los papeles parece estar lejos de ser un argumento para explicar la batalla por los tres palos hasta ahora. En un escalafón más alejado queda el portero español Sergio Rico, de quien destacan que “siempre ha sido muy popular en el grupo” aunque no participa por un espacio en el equipo inicial hoy en día.
Los datos sobre esto son contundentes y marcan la rotación que existe. Keylor estuvo como titular en siete encuentros de la actual temporada entre Ligue 1, Champions League y copas domésticas y recibió ocho tantos. Gigio, que demoró en ponerse a las ordenes del DT por haberse sumado al plantel más tarde tras ser figura en el título italiano en la Eurocopa, ya sumó dos presentaciones como titular y apenas recibió un tanto, más allá de haber ido al banco en otros cuatro duelos.
“Pochettino está intentando respetar el equilibrio del vestuario”, aclaran en el periódico italiano recordando que las repercusiones de la salida de Messi ante Lyon le hicieron “entender que es mejor tener cuidado”.
Durante las últimas semanas, el propio Pochettino había aclarado que la titularidad de todos los jugadores –y especialmente la de un puesto sensible como el arquero– iba a ser definida “partido a partido” y explicó: “Tener jugadores como ellos eleva el nivel y nos da competitividad en una temporada larga y que puede estar llena de obstáculos. Todos los jugadores saben cuando fichan por el PSG que la competitividad es grande y solo pueden jugar once en cada partido; y en el caso de los porteros uno solo”.
Es cierto que el ruido en torno a esta situación no es algo instalado simplemente desde Italia y camina por el terreno de la lógica competencia deportiva. Con 22 años, Donnarumma es una de las mejores apariciones debajo de los tres palos alrededor del planeta en el último tiempo y acaba de respaldar esa afirmación convirtiéndose en el MVP de la Eurocopa. “El PSG me buscó y me quiso, y yo quería venir al PSG. La competencia no me asusta, Navas es un gran portero, pero yo estoy aquí para jugar”, había aclarado meses atrás cuando esta batalla por sumar minutos recién se estaba iniciando.
Lo cierto es que desde su país, más allá de buscar argumentos a su suplencia entre el grupo sudamericano del plantel, aseguran que el disgusto de Gigio crece cada partido que va al banco. Corriere della Sera afirmó que está “descontento” y que ya “no sonríe”. “No puede ser: hace dos meses voló de un lado a otro arrastrando a Italia como protagonista absoluta a la conquista de la Eurocopa, ahora en cambio le queda ver jugar a los demás. Lo contrario sería absurdo, si fuera feliz. De hecho no es así”, firmó el periodista Carlos Passerini recientemente.
Al mismo tiempo, ya advierten que Juventus podría ir a buscarlo en el mercado de pases del próximo verano porque Donnaruma no aceptaría una segunda temporada como “reserva de lujo” de un Navas que tiene contrato hasta 2024. El joven arquero italiano arribó con el pase en su poder a Francia tras marcharse de Milan libre y firmó el 14 de julio de este año un vínculo que lo une con el PSG hasta el 2026. Sin embargo, un fantasma ya comienza a sobrevolar en su país: “¿Cómo puede el dueño de la selección no jugar en la selección de su club?”.
El conflicto ya empezó a escalar con fuerza puertas afuera del PSG y la gran tarea del cuerpo técnico que comanda el argentino estará en sostener las puertas blindadas del vestuario para generar una impermeabilidad ante los chispazos que se generarán a cada decisión teniendo el cuenta el calibre de deportistas que componen la estructura de la entidad. Por lo pronto, el próximo sábado ante Montpellier por la Ligue 1 y el martes siguiente ante Manchester City por Champions League las lupas volverán a estar puestas sobre el arco: ¿a quién elegirá para ser titular?
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