Este martes el Barcelona recibió un golpe de realidad al caer por 3 a 0 ante el Bayern Múnich en el Camp Nou en su debut en la Champions League. En lo que fue el primer partido en esta competición tras la salida de Lionel Messi, el conjunto español apenas pudo hacer pie en el campo de juego y fue ampliamente superado por el campeón de la Bundesliga, por lo que recibió la desaprobación de su público.
Una vez terminado el duelo, quien se acercó a las cámaras de televisión fue Gerard Piqué. El capitán dio la cara tras la derrota y reconoció que no tienen muchas más herramientas a las cuales apelar para afrontar duelos contra este tipo de rivales: “El equipo ha dado la cara y ha competido. Es lo que hay. Ahora somos lo que somos y esperemos que durante la temporada jugadores lesionados se vayan incorporando. Estoy convencido de que vamos a acabar compitiendo. En líneas generales, y a pesar de lo abultado de la derrota y de que a que ellos han sido superiores, no nos vamos a engañar, creo que el equipo tiene las bases con gente muy joven para acabar compitiendo y a final de temporada veremos”.
En este sentido, agregó: “Ahora mismo no estamos entre los primeros a ser favoritos, pero creo que muchas veces no hemos sido y lo hemos conseguido. Es una temporada en la que puede pasar mucho, ¿la temporada pasada quién daba de favorito al Chelsea? Nadie. El fútbol cambia muy rápido y son estados de ánimo. A pesar de lo abultado de la derrota hoy, el equipo ha dado la cara”.
El zaguero de 34 años hizo hincapié en lo que fueron los ingresos de jóvenes como Yusuf Demir, Álex Balde y Gavi: “Yo me quedo con que han entrado no sé cuantos chavales de 18 años”.
Con respecto a los silbidos que se oyeron en el estadio, sobre todo para Sergi Roberto, Piqué se mostró dolido y pidió al público que sea más contemplativo con un mediocampista que juega como improvisado como lateral para suplir un hueco.
En conferencia de prensa, el entrenador Ronald Koeman fue consultado por las frases de su capitán y el neerlandés coincidió en el análisis: “Hay que ser realistas. La gente joven ha demostrado tener futuro. Es lo que hay, luego recuperaremos jugadores como Ansu (Fati), Dembélé, es totalmente diferente a hoy en día”.
El Barcelona arrancó entonces con un 0-3 su nueva temporada europea, la primera desde la partida de Lionel Messi. Los goles de Thomas Müller y Robert Lewandowski, en dos ocasiones, le dieron la victoria al Bayern, que se afianza como candidato a conseguir el título. En la próxima jornada, el 29 de septiembre, el elenco español visitará al Benfica y los campeones de la Bundesliga harán lo propio en el Allianz Arena contra el Dinamo Kiev.
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