Es habitual que haya provocaciones antes de cualquier evento de los deportes de contacto, sea boxeo, MMA u otra arte marcial de esa índole, ya que sirven para vender el espectáculo. La tensión sube en las conferencias de prensa y pesajes donde los protagonistas llegan a veces empujarse o agredirse verbalmente. Pero en Bielorrusia todo se salió de control: un luchador le pegó un rodillazo volador a su oponente frente a las cámaras.
En las imágenes, que no tardaron en viralizarse en las redes sociales, aparecen dos peleadores listos para una sesión de fotos de cara su pelea promocionada por la empresa Zames Fight Club. En la previa del evento anunciado como ZAMES FC 3, que estaba programado para llevarse a cabo en la ciudad Minsk, un inesperado inconveniente obligó a los organizadores a intervenir de inmediato.
Todo transcurría con normalidad hasta que Nikita Khorunzhiy fue impactado en la pera por rodillazo volador de Mikhail Yanovich, quedando inconsciente antes de que la seguridad logre acorralar al agresor y él intente volver a ponerse de pie. Por este incidente, la pelea tuvo que ser cancelada y la organización decidió que se haga más adelante.
Existen algunos antecedentes donde la tensión subió a gran escala, como por ejemplo los del ex campeón de UFC Conor McGregor. El irlandés ha estado involucrado en tres conflictos en los cara a cara previos a la pelea de bastante alto perfil. La más reciente fue el mes pasado en UFC 264, donde intentó patear al estadounidense Dustin Poirier en tres ocasiones. En octubre de 2018, McGregor, intentó patear la mano de Khabib Nurmagomedov en la previa a su combate por el campeonato de peso ligero en UFC 229.
El último caso se remonta a la previa del UFC 196, cuando golpeó la mano de Nate Díaz mientras los dos se pusieron cara a cara antes de su pelea en el evento principal de peso welter. Otro suceso similar ocurrió con Jeremy Stephens, peso ligero de UFC, quien también fue sacado de una pelea con Drakkar Klose a principios de este año por empujarlo y provocarle una lesión en el cuello y una conmoción cerebral. Klose requirió de atención médica y hospitalización de inmediato.
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