El boxeador retirado Óscar de la Hoya confirmó su diagnóstico positivo al contagio del virus SARS-CoV-2. Por medio de sus redes sociales, el fundador de la promotora Golden Boy difundió un video desde una cama en el Centro Médico White Memorial, ubicado en la ciudad de Los Ángeles, California, donde aseguró estar padeciendo los síntomas de la enfermedad por COVID-19 a pesar de contar con la vacuna.
“Me siento mal, mal, mal. Tengo COVID. Mi pecho no… No puedo respirar bien y estoy bien bien adolorido”, fueron las palabras que pronunció en uno de los videos con un notable gesto de cansancio y malestar. A pesar del tono de sus declaraciones, por el momento se encuentra estable, pues en el material se observó el monitor de su cama, el cual evidencio que sus niveles de oxigenación en la sangre se encuentran por encima del 95.
“Quería que escucharas directamente de mí que a pesar de estar completamente vacunado, contraje COVID y no voy a poder pelear el próximo fin de semana. Prepararme para este regreso ha sido todo para mí durante los últimos meses y quiero agradecer a todos por su tremendo apoyo. Actualmente estoy en el hospital, recibiendo tratamiento y estoy seguro de que volveré al ring antes de que termine el año. Dios bendiga a todos y cuídense”, fue el texto que acompañó su publicación.
De inmediato, el atleta comenzó a recibir menajes de apoyo entre quienes destacaron personajes del espectáculo como Alejandro Sanz, quien dijo “Ánimo, campeón. Esta pelea la vas a ganar. Abrazo grande, amigo”, así como otras personalidades del ámbito boxístico como el cubano Ray Díaz y el campeón olímpico británico Galal Yafai.
De esa forma, en palabras del propio pugilista, su ansiado retorno a la actividad deportiva a los 48 años tendrá que demorar algún tiempo. Su siguiente objetivo era el de enfrentar al excampeón de artes marciales mixtas Vitor Belfort el próximo 11 de septiembre. De hecho, el enfrentamiento entre ambos personajes fue anunciado como el evento estelar de la noche, por lo que la organización deberá tener una súbita reorganización.
Según apuntan diversos informes, el candidato más fuerte para sustituir a De la Hoya en el ring es Evander Holyfield. El personaje de 58 años también es un exboxeador profesional estadounidense. Fue medallista olímpico, así como campeón mundial en su faceta en el máximo circuito. A pesar de su cartel, el nuevo contrincante debe ser autorizado por la Comisión Atlética del Estado de California para la realización del evento.
Desde principios de año, el empresario anunció su regreso del retiro y confirmó su pelea para el 11 de septiembre. En sus redes sociales ha documentado el proceso de preparación. Incluso, la semana pasada abrió las puertas de su entrenamiento a los medios de comunicación, donde se le pudo observar en buenas condiciones.
De acuerdo con sus planes, confesó en una entrevista para ESPN, buscó realizar una serie de peleas a lo largo del 2021 y el 2022. Incluso, declaró su intención de “hacer una el 5 de mayo, el próximo año, a retar al mejor boxeador del mundo que es Mayweather o, si no quiere pelear Mayweather y darme la revancha, retar al Canelo Álvarez”, aunque tiempo después descartó la posibilidad contra el tapatío.
El regreso a los encordados de diversos boxeadores retirados ha sido motivado, principalmente, por causas económicas. A pesar de ello, de la Hoya negó que esa sea su situación, pues recordó la fortuna de más de USD 800 millones que hizo durante su carrera, así como los bienes que posee en la actualidad. Por el contrario, “lo estoy haciendo porque realmente amo y extraño el deporte”, recalcó.
SEGUIR LEYENDO: