Darío Benedetto protagonizó una de las transferencias más singulares del mercado de pases: firmó a préstamo con el Elche de España, club en el que es accionista desde hace más de un año. El ex goleador de Boca abandonó su sitio en el Olympique de Marsella francés y desembarcó en el combinado que lo tendrá en un doble rol como un de los propietarios y jugador.
El Pipa fue presentado por Joaquín Buitrago, quien es el presidente de la entidad en los papeles: “El club ha hecho un gran esfuerzo para que el Pipa se pueda incorporar a nuestra estructura, pero no menor ha sido el esfuerzo que él ha hecho para poder venir a nuestro club. Ha querido ser partícipe en primera persona de este proyecto que lógicamente le ha gustado y ha apostado fuerte. Viene a sumar al equipo”, expresó el directivo en conferencia.
Con lógicas razones, la primera pregunta de los periodistas en la conferencia de prensa estuvo emparentada a esta peculiar suceso: “Tenía otras opciones, pero apunté a este proyecto. Conozco a mis representantes, sé muy bien qué clase de persona son, a qué apuestan, tienen mucha ambición y eso es lo que a mi me gusta, lo que me trajo a Elche. Si bien soy accionista del club, creo que eso no lo puse por delante de nada, simplemente fue una decisión mía de querer ser parte del proyecto fuera de las acciones que tengo en este club”.
“El tener acciones en el club me lleva a tener aún más compromiso. Como siempre digo, sigo siendo jugador, el día de mañana no sé que va a pasar de mí. Pienso solamente en el grupo que hay, en el equipo y en cumplir los objetivos que tenemos como equipo”, sentenció el atacante de 31 años que vestirá su octava camiseta tras pasar por Arsenal de Sarandí, Defensa y Justicia, Gimnasia de Jujuy, Boca Juniors, Xolos de Tijuana (México), América (México) y Marsella (Francia).
Sin espacio en el fútbol francés, el atacante evaluó otras propuestas hasta que finalmente optó por desembarcar en el club que lo tiene como uno de sus accionistas desde el 2019: “En el momento que hubo otras propuestas de otros equipos, se tardaba mucho en cuanto a la negociación y veníamos hablando con mis representantes. Les dije que tenía muchas ganas de venir acá. Ellos me dijeron qué pasa con los otros equipos que pueden llegar a estar y les dije no, quiero estar en Elche. Se resolvió muy rápido. En dos días”.
El representante argentino Christian Bragarnik es la cara visible de este grupo de accionistas que invirtió en el Elche y que tiene, entre otros involucrados, a los futbolistas Benedetto y Gustavo Bou.
“Lidero un proyecto de varias personas que decidimos meternos en esta idea de incursionar en el fútbol español. Soy parte de los que han comprado el Elche, pero conmigo también inclusive han entrado dos jugadores conocidos como Darío Benedetto y Gustavo Bou. Somos los que estamos en este proyecto, esto es un poquito de todos que venimos trabajando en conjunto”, expresó Bragarnik en diálogo con el programa Un Buen Domingo de Radio La Red en octubre del año pasado. “Salió un poquito de ellos. Les está yendo bien desde la parte deportiva y siempre me decían, a ver cuándo me sumás en algo. Se dio que les comenté, quisieron entrar y están contentos. Son parte del grupo que me acompaña en este desafío”, agregó quien además oficia como manager de ambos futbolistas.
Su doble rol se extenderá, en un principio, a lo largo de la cesión que acordaron los clubes (no se informó la extensión) aunque la institución española tiene una opción de compra. Elche comenzó la Liga en España con un empate ante Atheltic Bilbao y una derrota contra Atlético Madrid, un partido que marcó el debut oficial de Benedetto cuando ingresó en el complemento por Pere Milla. En la plantilla también están sus compatriotas Pablo Piatti, Iván Marcone, Guido Carrillo y Lucas Boyé. Con estos dos últimos deberá competir por los puestos disponibles en ofensiva.
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