La participación de Sampaoli en los incidentes dentro del campo de juego
La locura se apoderó de un simple partido de fútbol. El Niza recibía al Olympique de Marsella por la Ligue 1, cuando los ultras locales le lanzaron una botella a Dimitri Payet, que impactó en su espalda. El futbolista devolvió el proyectil, lo que provocó que los violentos desbordaran a la seguridad e ingresaran al campo de juego, generando una verdadera batalla campal.
Fueron no menos de 50 ultras los que saltaron al césped para agredir al plantel visitante, que dirige Jorge Sampaoli. Afortunadamente, la situación se apaciguó y de apoco los aficionados radicalizados regresaron a sus lugares. Pero cuando parecía que todo se normalizaba, del otro lado de la cancha el argentino dio pie a otro episodio de violencia. Si bien no está claro aún qué fue lo que hizo enfurecer al entrenador, las cámaras de la televisión captaron el momento en el que sus propios jugadores lo estaban separando de un tumulto que él había provocado.
El técnico intentó pelear contra un miembro del staff del Niza y terminó vociferando insultos. Allí se desató una gresca entre hombres de seguridad y suplentes e integrantes del cuerpo técnico del Marsella, pero en ese momento Sampaoli aprovechó para marcharse rumbo al vestuario y escapar de una posible agresión.
Sin embargo, en el túnel, cuando el cotejo permanecía con el status de “interrumpido (posteriormente terminó siendo suspendido definitivamente a 15 minutos del final), Sampaoli siguió exteriorizando su furia ante la situación que le tocó vivir a la plantilla que comanda. La cámara fija situada allí capturó la confusión y el caos allí reinante. Y la voz del ex orientador del seleccionado argentino en Rusia 2018 se escucha clara y contundente.
“Hay que tomar decisiones”, reclamó Sampaoli ante los árbitros y las autoridades de la Ligue 1 allí presentes. “¿Que nosotros somos los culpables? Estás loco”, le gritó luego a un integrante del staff técnico del Niza, quien lo señaló por la segunda parte de la reyerta.
Luan Peres, Guendouzi y Payet sufrieron heridas leves durante la agresión, motivo por el cual el plantel visitante decidió no volver a salir para disputar lo que restaba, aunque la Policía aseguró que había garantías para continuar. Por su parte, los jugadores el Niza sí regresaron al campo, en un gesto poco solidario con sus adversarios.
La Ligue 1 deberá decidir qué hacer, si decreta al Niza como el ganador del cotejo o si le otorga el 3-0 al Olympique por el escándalo que se vivió por el comportamiento salvaje de la parcialidad local. Al mismo tiempo, habrá que esperar si hay sanciones para los que participaron en la gresca entre los planteles, entre ellos, el propio Sampaoli, que por salir a defender a sus pupilos, terminó quedando en el ojo de la tormenta.
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