Naomi Osaka sorprendió al mundo del tenis en mayo al retirarse de Roland Garros para cuidar su salud mental, después de la polémica por haber sido sancionada con 15.000 dólares de multa por no haber acudido a una rueda de prensa durante el torneo. “Creo que lo mejor para el torneo, para otros jugadores y para mi bienestar es que me retire para que todo el mundo pueda centrarse de nuevo en el tenis que se está jugando en París”, comunicó la jugadora en su cuenta de Twitter en ese entonces.
Luego, participó de los Juegos Olímpicos, en donde quedó eliminada tras perder ante la checa Markéta Vondrousova en los octavos de final y este fin de semana regresó al ruedo en la WTA en el marco del Masters de Cincinnati en donde tuvo que volver a sentarse frente a los micrófonos. Este lunes en una de sus primeras conferencias de prensa, la japonesa se quebró al ser consultada sobre su relación con los medios.
Tras una serie de preguntas, un periodista le cuestionó su postura de no hablar con los medios para cuidar su salud mental: “Tu también tienes intereses que van más allá del tenis que sirven al tener una plataforma de medios de comunicación que te presentan. Mi consulta es, ¿cómo eres capaz de equilibrar estas dos cosas?”. Ante esto, Osaka se sorprendió y le dijo, visiblemente incómoda, que su punto de vista era interesante.
“Siento que esto es algo que... no puedo hablar por todos, sino por mí misma, pero desde que soy joven tengo mucho interés de los medios puesto encima y creo que es por mis antecedentes y por cómo juego”, respondió la tenista algo angustiada. Luego siguió: “Diría que en ese sentido soy diferente a mucha gente y no puedo evitar que haya cosas que tuiteé o diga que terminen creando artículos de noticias o cosas así. Se que eso es porque he ganado algunos Grand Slams y tengo que dar muchas conferencias de prensa porque estas cosas pasan. Pero también diría que no estoy segura de cómo equilibrarlo. Es como si aún lo estuviera averiguando”.
Después de eso, la conferencia de prensa siguió, pero cuando otra periodista quiso consultarle sobre su preparación para Cincinnati, la deportista de 23 años no pudo seguir y se quebró. La locutora intervino para pedir un descanso de unos minutos y cuidar a la jugadora, que más tarde regresó a su asiendo y respondió esa última consulta.
Antes de ese lastimoso momento, Osaka había sido consultada sobre cómo le afectó el tiempo en el que se alejó de la actividad para descansar y recuperarse mentalmente: “Era algo que necesitaba hacer y más que nada sentí que estaba encerrada en mi casa durante unas semanas y me avergonzaba salir porque no sabía si la gente me mirarían de diferente manera. Más de lo que lo hacían antes. Pero creo que lo que hizo que abriera los ojos fue ir a los Juegos Olímpicos y que otros atletas se me acercaran para decirme que estaban muy contentos de lo que yo había hecho. Después de eso, sí, estoy orgullosa de lo que hice y creo que tenía que hacerse”, sostuvo. Además, contó que le envió un mensaje a Simone Biles por lo sucedido en Tokio, aunque no reveló si intercambiaron algunos chats.
La nipona, número 3 del ranking de la WTA, anunció la semana pasada que donará todo el dinero que gane en el torneo que disputará esta semana en Cincinnati para ayudar a las tareas de rescate en Haití, nación azotada por un terremoto que ha dejado más de 1.200 muertos. A través de una publicación en sus redes sociales, confirmó que pondrá las ganancias a disposición del país en el que nació su padre.
“Duele realmente ver toda la devastación que ha ocurrido en Haití y siento que ni siquiera podemos tomarnos un descanso”, sostuvo Osaka, que agregó: “Sé que la sangre de nuestros ancestros es fuerte y que nos levantaremos una vez más”. La tenista tiene una profunda conexión con el país de su padre, Leonard Francois, que nació en Jacmel, una ciudad portuaria en la costa sur de Haití. Con los años, él conocería a su esposa en Japón y ambos se irían a vivir a Estados Unidos. Allí nació Naomi, quien decidió competir bajo la nacionalidad de su madre.
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