Por qué Tokio 2020 puede ser la consagración de Diego Lainez

El entorno del fútbol mexicano está listo para que México intente conseguir, de nueva cuenta, una medalla de oro Olímpica durante Tokio 2020. No se puede negar que muchos de los reflectores de la Selección Mexicana sub-23 estarán puestos sobre el jugador del Betis de España, Diego Lainez. El extremo de 21 años intentará que este torneo se convierta en su consagración en el mundo del fútbol.

Lainez debutó en la primera división de México con el Club América en el año 2017 bajo el mando del entrenador Ricardo La Volpe. Sus grandes cualidades rápidamente le ayudaron para recibir cada vez más y más oportunidades en la cancha. De a poco se convirtió en una de las máximas joyas del fútbol mexicano y en referente del equipo azulcrema.

Para el año 2019, el nacido en Villahermosa, Tabasco, ya estaba consolidado como titular y su juego había aportado para que Las Águilas salieran campeonas de la Liga Mx en el Apertura 2018 enfrentando a Cruz Azul. En el conjunto de Coapa jugó 51 partidos en todas las competencias y colaboró con cinco anotaciones. Un mes después del titulo, el Real Betis hizo oficial la compra del canterano americanista por un total de EUR 14 millones.

Con los españoles, Lainez ha ido evolucionando y mejorando en su fútbol. Los entrenadores han trabajado de a poco con el joven mexicano, dándole oportunidades que se fueron tornando menos esporádicas. En su primera temporada en Europa disputó 16 partidos oficiales entre liga, copa y Europa League.

Posteriormente se habló de una posible cesión a un club de la liga holandesa o francesa, para que el extremo pudiera conseguir más minutos y lograra conseguir la confianza necesaria en los máximos escenarios europeos. Sin embargo, su constancia y disciplina le llenaron el ojo al técnico Manuel Pellegrini, quien aportó para la consolidación de Lainez en el equipo español.

Diego mejoró tanto en aspectos futbolísticos como en temas físicos. Su trabajo en el gimnasio se ha visto reflejado en diversas fotografías actuales, donde se puede ver con un notorio aumento de masa muscular. Esto lo ha sabido complementar con sus cualidades de regate y velocidad. Su conducción de balón se fue haciendo cada vez más eficaz y en el mano a mano con los defensores ya no es tan fácil arrebatarle el esférico en forcejeos cuerpo a cuerpo. Además, su baja estatura le permite contar con un mayor balance, que en ocasiones lo hace imposible de detener cuando se enfila al arco con una diagonal de la banda hacia el centro del área rival.

Su mejoría dentro del campo de juego le ha permitido lucir cada vez más en el Betis. Aunque su desarrollo continúa, se ha sabido adaptar y aprovechar las oportunidades. En la temporada 2020- 2021 consiguió disputar 21 partidos y 856 minutos de la Liga de España, la mayoría de ellos entrando como revulsivo en los segundos tiempos. Sus participaciones han sido notorias para la prensa de aquel país, dada su influencia en el juego ofensivo con regates y pases que generan oportunidades de gol.

Para Tokio 2020, la Selección Mexicana debió solicitar el permiso del Real Betis para que Lainez pudiera disputar la justa Olímpica. Es preciso recordar que, al no ser fecha FIFA, los clubes no tienen la obligación de prestar a sus jugadores para que disputen el torneo. Sin embargo, la negociación llegó a buen puerto y con el llamado del futbolista zurdo, los ojos del mundo empezaron a voltear hacia él.

La influencia que el mexicano tendrá en los Juegos Olímpicos es tanta que la FIFA lo reconoció como uno de los grandes talentos a seguir durante la justa veraniega. La lista de nueve futbolistas la comparte con nombres de la talla de Dani Alves y André Pierre Gignac.

El máximo organismo del fútbol anteriormente ya había destacado a Lainez como uno de los candidatos a ganar el Golden Boy 2020. Este premio se otorga al mejor jugador del año a nivel mundial con menos de 21 años. Esta candidatura la compartió con estrellas del futbol internacional como Erling Haaland, Ansu Fati, Vinicius Jr y Alphonso Davies.

Con todo esto a su favor, Tokio 2020 está puesto para convertirse en el escenario de consagración para él tanto en la Selección Mexicana y en la élite del fútbol mundial. Las virtudes del mexicano se observan suficientes para que, con una buena actuación en el certamen, logre darle a México una presea Olímpica y comenzar a pensar en un traspaso a un club más importante en el viejo continente.

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